Sigue la polémica en Santa Fe por el reparto de planes sociales

Santa Fe. - Una tensa calma incrementada por versiones sobre un estallido de violencia piquetera envolvió ayer a esta ciudad, donde sigue la controversia entre la Municipalidad y Emaús y otros grupos piqueteros por la distribución de los 2.992 planes sociales.
El durísimo conflicto que generó los graves sucesos del viernes pasado frente al municipio, obligó al intendente Marcelo Alvarez a mantener reuniones con el gobernador Carlos Reutemann y el arzobispo Gabiel Storni, a quienes les informó sobre el diferendo que persiste y puede causar nuevos hechos violentos.
El consejo consultivo, en función de los reclamos de Emaús, dio a conocer el detalle de los 2.922 planes sociales entregados en el marco del Programa para Jefes de Hogar, distribuido entre 117 instituciones laicas y religiosas, 54 vecinales, 15 entidades gremiales y 32 grupos de desocupados.
Ayer, el titular de Emaús, Rodolfo Gonzalez , volvió a decir que fueron "injustamente discriminados", ya que del millar de subsidios pedidos sólo les adjudicaron 600. Por ello, se retiró de la reunión del consejo alegando "manejos oscuros" en el organismo.
Alvarez respondió las críticas de Emaús al destacar que esta vez participaron decenas de ONG en la distribución, en lugar de destinar el ciento por ciento de los planes a grupos piqueteros. "Dividimos la ciudad en siete zonas -dijo el intendente- y ahora hay 117 ONG con más de mil planes, y lo mismo ocurrió con más de 50 vecinales y entidades gremiales".
Por su parte, la CGT señaló en un documento que nunca disputará con otros desocupados "el derecho a recibir esta migaja de subsidios, pero nadie tiene derecho a negar a los desocupados contenidos por los sindicatos la posibilidad de que los reciban".