Torneo Apertura

Acosta rompió el piquete de Banfield

El veterano delantero convirtió los dos goles con los que San Lorenzo se impuso al Taladro

Un viejo conocedor del gol, Alberto Acosta, quebró anoche en el Nuevo Gasómetro el piquete que levantó Banfield y le dio sobre el final el triunfo a San Lorenzo por 2 a 0.
El Beto Acosta, a los 35 y a los 41 minutos, le hizo pagar a Banfield por su excesiva tendencia conservadora y ubicó a su equipo, de momento, como único líder del Clausura, cumplida la primera fracción de la tercera fecha. Primero con un cabezazo perfecto por encima de Cristian Lucchetti y luego por intermedio de un penal.
Todavía afectado por la media luz en la que quedó tras la lesión que sufrió el armador Leandro Romagnoli, San Lorenzo fue impotente en el primer capítulo ante la muralla que le puso Banfield y el intento terminó sin goles.
El equipo de Manuel Pellegrini falló hasta la chance de un penal, que Lucchetti le detuvo al capitán Guillermo Rivarola, a los 8 minutos del segundo tiempo.
Durante la primera etapa a San Lorenzo le faltó creatividad, sorpresa y penetración para superar el escollo de dos líneas de cuatro que le preparó el uruguayo Luis Garisto.
Ante la ausencia obligada del Pipi Romagnoli el papel de conductor lo asumió el veterano Leonardo Rodríguez, pero sus aportes más útiles fueron producto de acciones originadas con pelota detenida.
Sobre el final del primer período Leo Rodríguez buscó un claro en el poblado fondo banfileño, lo encontró y probó, pero atajó Lucchetti.
En esa escena Rodríguez recibió un golpe en el tobillo derecho de Adrián González que lo obligó a quedarse en los vestuarios para la segunda etapa siendo reemplazado por Erviti.
Además de Erviti, Pellegrini puso en la cancha al experimentado Beto Acosta por el mediocampista Leonardo Di Lorenzo.
El tercer cambio también fue clave, la entrada de un creativo como Sarría por un jugador de equilibrio como Cristian Zurita.
Con esas variantes San Lorenzo comenzó a reparar su imagen y comprometió más a Banfield, pero el obstáculo insalvable seguía siendo Lucchetti.
La mayor diferencia en el segundo capítulo consistió en que el local intensificó su ataque y Banfield se limitó a resguardarse.
Los sureños parecieron levantar un piquete para proteger a Lucchetti, pero Acosta abrió el camino hacia el éxito.(DyN)

Leo Rodríguez se esfuerza por encarar un ataque.