La empresa de la energía seguirá en la órbita del Estado

Mercier dijo que la EPE "no se va a vender por muchos años"

"No hay inversores", afirmó el ministro de Hacienda

Jorge Sansó de la Madrid

"La Empresa Provincial de la Energía (EPE) no se va a vender nada", les dijo ayer el ministro de Hacienda de la provincia, Juan Carlos Mercier, a los diputados provinciales. El funcionario estuvo en la Legislatura para dar cuenta sobre la situación socioeconómica nacional y provincial, y en forma sorpresiva le dio la extrema unción a uno de los proyectos más discutidos y controvertidos de la última década, en la provincia.
Mercier dijo que la continuidad de la EPE en la órbita estatal no es una decisión del gobierno provincial sino una imposición de circunstancias desfavorables que habrán de perdurar por mucho tiempo. "Acá no se va a vender nada. Hoy por hoy no va a haber más inversiones en la Argentina por muchísimo tiempo. No es que se quiera vender o no vender, acá lo que se ha roto es la confianza en el derecho de propiedad", sentenció de modo taxativo y crudo.
En el medio de la charla con los diputados, el demoprogresista Carlos Favario le preguntó sobre la condición impuesta por el Banco Mundial de privatizar la empresa de la energía para efectuar un segundo desembolso del crédito otorgado a la provincia. Mercier precisó que esa condición no alude "a vender, sino a ponerlo a la venta. Lo que nosotros nos comprometimos antes del segundo desembolso es que teníamos que demostrar que habíamos puesto a la venta la EPE", aclaró.
En otro momento de la audiencia, el diputado radical Jorge Alvarez señaló que "el pliego (para la privatización) es nefasto" ya que "una cosa es que haya una urgencia para cumplir con una condición del Banco Mundial pero que se haya aprobado el pliego que se aprobó es lamentable porque es una bomba de tiempo, con ajustes de tarifas en dólares y con la posibilidad de reducción de capital", entre otras cuestiones.
En respuesta al legislador, Mercier decidió tranquilizar definitivamente a los diputados y sentenció de muerte, al menos por "muchísimos años", al proceso de privatización de la EPE para la sorpresa de algunos representantes, dado que hasta ese momento la iniciativa había sido presentada públicamente, incluso por el gobernador Reutemann, como en una suerte de aletargamiento, pero vigente y en un compás de espera hasta encontrar un momento más favorable.
"No es que nosotros querramos o no vender. Acá lo que se ha roto es la confianza en el derecho de propiedad y lo que no va a haber es ahorro. Y cuando no hay ahorro en cualquier modelo económico hay sólo dos formas de ahorrar: voluntariamente o compulsivamente. Y en economía se planifica el ahorro y la inversión. Cuando no hay ahorro no hay inversión, entonces sin ahorro dependemos de que venga alguien de afuera e invierta".
Ante este panorama, se preguntó: ¿Creen que podemos tener chance de algún inversor?", y se respondió: "Creo que no. Entonces eso está absolutamente descartado por muchísimos años. Como también está descartado, y por muchos años, el valor que tenía la empresa", respecto a cuando se decidió la privatización.

Según el ministro, la crisis detuvo la privatización.