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Reutemann, un grande

Hace mucho tiempo conocí a nuestro actual gobernador Carlos Alberto Reutemann cuando todavía ni siquiera era un destacado corredor de Fórmula 1. A pesar de eso siempre supe que era un triunfador, un grande. La seriedad con que afrontaba los desafíos, la dedicación que mostraba en superarse y la capacidad de liderazgo que demostraba ya en aquel entonces eran dignas de admiración. Hoy, mucho tiempo después, y después de haber trabajado junto a muchos políticos y haber dedicado ad honórem gran parte de mi vida a la militancia dentro del Partido Justicialista puedo decir que estoy orgullosa de nuestro actual gobernador y les aseguro que no exagero cuando digo que Reutemann es un grande, simplemente el mejor gobernador del país. Esto quedó más que demostrado a mi criterio cuando luego de la renuncia de Adolfo Rodríguez Saá le ofrecieron ser presidente de los argentinos y declinó arguyendo que si no era con el voto de la gente él no ocuparía ese cargo, tal cual lo hiciera Lisandro de la Torre el 6 de septiembre de 1930, cuando Uriburu le ofreció la presidencia luego de la renuncia de Yrigoyen. Hoy más que nunca es imprescindible contar con hombres como él, capaces de demostrar seriedad, trabajo y transparencia, que nos permitan a nosotros los ciudadanos comunes sumarnos a la realización de un esfuerzo conjunto por la creación de un nuevo país. Señor gobernador, gracias por su gestión, la verdad es un placer ver su retrato a diario en el Palacio Municipal de Casilda.

Tarchisia Ottaviani Marconetti, Casilda