Hemofílicos hacen un dramático pedido de ayuda

Un grupo de pacientes y familiares de enfermos de hemofilia lanzaron ayer un dramático SOS en el Monumento Nacional a la Bandera. Por un lado, pidieron por la continuidad de la fundación que les provee los medicamentos para su subsistencia, ahogada por la crisis financiera a la que la sometieron el Pami y la Nación, que le deben 4 millones de dólares. Por el otro, reclamaron que se liberen las partidas de factores 8 y 9, los anticoagulantes que necesitan, que -según ellos- permanecen frenadas en el puerto de Buenos Aires merced a la especulación.
Según explicaron los manifestantes, la falta de los factores 8 y 9 está siendo reemplazada por el "crío precipitado", un anticoagulante que se obtiene del plasma sanguíneo, pero que exige una gran cantidad de donantes. Como ejemplo, citaron el caso de un chico que precisa 250 donaciones de sangre, las que pueden hacerse en los hospitales Clemente Alvarez, Carrasco y Vilela con sólo citar que se destina a los niños hemofílicos.
La hemofilia es una enfermedad que transmite la mujer y padece el hombre, por la que no coagula la sangre y quien la sufre está siempre en riesgo de padecer hemorragias, tanto externas como internas. Los coagulantes son indispensables para la supervivencia del enfermo. Y como decía uno de los carteles que portaban ayer en su manifestación, "si no se invierte en salud se paga con la vida".