Objeciones al pedido papal de dar valor legal a la vida prenatal

El pedido papal de reconocimiento jurídico del embrión humano en todas las legislaciones del mundo chocó con la virulenta réplica del gobierno italiano. La vicecanciller Margherita Boniver denunció ayer el llamado de Juan Pablo II como una intención de hacer “retroceder a las mujeres al estado de reproductora inconsciente, incapaz de elegir y decidir”.
“Con este pedido se quiere hacer anular una ley sobre la interrupción voluntaria del embarazo aprobada por referendum”, remarcó Boniver, miembro de Forza Italia, partido del premier Silvio Berlusconi.
La subsecretaria de Relaciones Exteriores italiana sostuvo que la separación entre el Estado y la religión “es una de nuestras más grandes conquistas y debe ser protegida”.
Por su parte, el ministro de Salud Girolamo Sirchia, afirmó que tendrá que ser el Parlamento el que dará una respuesta al problema del estatus jurídico de los embriones, problema nuevamente de actualidad tras las palabras del Papa.
Sirchia aseguró que la ley sobre la procreación asistida que se discute en la Cámara será atenta y rigurosa. “El texto que llevamos adelante es el mismo aprobado por la Cámara en la pasada legislatura: una propuesta rigurosa, donde el embrión es plenamente respetado”, dijo.
El aborto fue autorizada en Italia a partir de 1978, pero la ley permite a los médicos la objeción de conciencia para rechazar la práctica de estas intervenciones.
El Papa pidió ayer un reconocimiento jurídico del embrión humano, “en particular su derecho fundamental a la vida”, durante el Angelus en Plaza San Pedro. El nuevo llamamiento del Papa en defensa de la vida abarca todos los grandes temas, desde la condena del aborto, la eutanasia, las manipulaciones genéticas, la fecundación artificial, pero también la condena de “quien mata en nombre de Dios”.
La invitación del Pontífice a introducir en la legislación italiana el reconocimiento de la identidad jurídica del embrión dividió una vez más a políticos e intelectuales locales. La bancada de diputados de derecha reaccionó con unánime aprobación y ofreció su total disponibilidad a aceptar la invitación del pontífice.
El diputado de la derechista Alianza Nacional, Alfredo Mantovano dijo: “La existencia de la vida humana desde el momento de la concepción, científicamente probada, hace que este paso sea necesario”.(ANSA)