Tel Aviv. - Cinco palestinos murieron ayer en el sur de la franja de Gaza, en una misteriosa explosión que desintegró su auto y tiene todo el sello de una "ejecución selectiva", en tanto un árabe-israelí que fue tomado por un judío resultó herido en una emboscada en el norte de Cisjordania. El ataque eclipsó una semana de intensos contactos entre destacados funcionarios israelíes y palestinos, que, en principio, deberían poner fin a 16 meses de sangriento conflicto. El líder palestino, Yasser Arafat, condenó la acción que calificó como prueba de que el gobierno israelí sigue "su constante escalada de violencia contra nuestro pueblo".
Sobre la misteriosa explosión, los voceros militares israelíes se negaron a hacer comentarios, pero el sitio Internet del diario Haaretz afirmó que fue "una operación llevada a cabo por Israel" con el objetivo de eliminar a Ayman El-Bahdari, de 31 años, uno de los cinco palestinos muertos que era militante del Frente Democrático para la Liberación de Palestina (FDLP).
Prevención y no castigo
Sin embargo, justamente ayer el mismo diario había referido que la magistratura militar israelí fijó rígidas reglas para las "ejecuciones selectivas", prohibiéndolas como "represalia por eventos pasados" y autorizándolas sólo para "prevenir ataques futuros". Pero al mismo tiempo refirió que en la reunión secreta de la semana pasada en Jerusalén Ariel Sharon rechazó el pedido de los tres emisarios del presidente palestino Yasser Arafat para una moratoria de 10 días en las ejecuciones selectivas, en espera de su próxima reunión, al regresar el premier israelí de su inminente visita a EEUU para reunirse con el presidente George Bush.
En un volante el FDLP, en cuyas filas militaban dos de los cinco palestinos muertos, amenazó con venganza.
Las circunstancias de la explosión aún son inciertas: los cinco muertos, entre los cuales hay al menos dos agentes de las fuerzas de seguridad palestinas (con toda probabilidad los dos militantes de Al Fatah) iban rumbo a un puesto de bloqueo al este de Rafah, a apenas 400 metros del límite con Egipto, cuando su auto fue imprevistamente golpeada por una potente deflagración. Algunos testigos dijeron que la zona había sido sobrevolada poco antes por un helicóptero de combate israelí, en tanto otros dijeron que el auto habría sido alcanzado por un misil tierra-tierra disparado desde un tanque. Cuatro de los cinco palestinos murieron en el acto, en tanto el quinto murió en el hospital El-Shifa de Gaza.
Emboscada
De tratarse de un ataque israelí, el incidente seguramente aumentará la tensión y profundizará el ciclo de represalias que ha dejado más de un millar de muertos en 16 meses.
La explosión de Gaza desencadenó la inmediata reacción de milicianos palestinos, que juraron venganza. En una emboscada en las cercanías de Jenin, en el norte de Cisjordania, Rasslan Mahjneh -un investigador árabe-israelí de Betselem, el Centro Israelí para la Defensa de los Derechos Humanos en los Territorios-, fue herido en el tórax de tres disparos. Al volante de su auto con placa israelí, Mahjneh con toda probabilidad fue confundido con un judío. (Ansa, Reuters y DPA)
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