Boca tiene la mente puesta exclusivamente en el Clausura. No quedan dudas si se revisa los nombres que saldrán a jugar al Coloso. El técnico Oscar Tabárez decidió conformar un equipo alternativo con ausencias notorias. La más sentida para los amantes del buen fútbol es la de Juan Román Riquelme, así como también para sus compañeros que no tendrán a su lado al eje por donde pasa el juego de los xeneizes.
No será la única. Ni Guillermo Barros Schelotto ni Delgado estarán en la ofensiva de Boca, dejando sus lugares al repatriado Alfredo Moreno y al pibe Julio Alcorsé, del que se tienen cifradas expectativas. El que se salvó del recorte del uruguayo Tabárez es Wálter Gaitán, quien no sólo cargará con su cuota de experiencia sino con un pasado canalla que los hinchas rojinegros le harán recordar.
En otro orden, Boca decidió rescindir el contrato del japonés Naohiro Takahara, quien llegó el año pasado a préstamo a cambio de 300 mil dólares, en una operación pergeñada por el presidente Mauricio Macri. La opción definitiva del delantero de la selección japonesa había sido fijada en 4 millones de dólares.
Por su parte, Tabárez aseguró que Antonio Barijho no está dentro de sus planes.
| |
La Ciudad
