La crisis golpea a la salud bonaerense

Protestas de enfermos y médicos por una severa interrupción de la cadena de pagos

Las restricciones bancarias y la devaluación del peso siguen teniendo en jaque al sistema de salud, tanto público como privado, que enfrenta una severa interrupción de la cadena de pagos, protestas de trabajadores y de pacientes y desabastecimiento de medicamentos e insumos. En este panorama, la obra social de los jubilados, el Pami, es uno de los puntos más débiles.
Mientras Mercedes Emeaudi, presidenta de la Cámara de Prestadores de la Salud de Seguridad Social de la Capital Federal, recordó que la obra social les debe los servicios desde agosto, el Foro en Defensa de la Seguridad Social anunció un cacerolazo para hoy frente a la sede central del Instituto.
Pero también los médicos de hospitales bonaerenses anunciaron una protesta hoy en Ramos Mejía, mientras que la instituciones de diagnóstico médico reclamaron un "dólar salud" diferencial para que puedan seguir haciéndose las prácticas que requieren insumos importados.
La Cámara de Instituciones de Diagnóstico Médico (Cadime) sostuvo que "no podrán realizarse diversas prácticas ante la dolarización de los insumos importados". Esto afectaría a análisis de HIV, estudios oncológicos, las tomografías computadas y las radiografías.
Por otra parte, el secretario general del Cicop (gremio de los médicos bonaerenses), Jorge Yabkowski, convocó a una movilización de los hospitales del Oeste del Gran Buenos Aires (Posadas, Carrillo, Paroissien y Güemes), que se hará en Ramos Mejía. La marcha, que se hará hoy por "un presupuesto de emergencia en salud y contra el desabastecimiento hospitalario" por el centro de esa localidad terminará a las 11.30 con un acto en avenida de Mayo y Rivadavia.
En este sentido, Yabkowski, explicó que "se están agotando los stocks de insumos" y que "los que se consiguen se pagan con sobreprecios" y señaló que "se suspendieron las cirugías programadas generalizadas, hay salas cerradas, pacientes con HIV o hemofilia que no consiguen medicamentos y prestaciones que no se pueden brindar".
Ayer también hubo una manifestación de pacientes hemofílicos y sus familiares, quienes se encadenaron frente a las puertas de la Fundación de la Hemofilia, en el barrio de Palermo, en reclamo de medicamentos anticoagulantes.
Los pacientes también exigen que esa fundación no se cierre, por los graves problemas económicos que tiene, ya que es el principal centro de atención al hemofílico.
Los anestesistas del Hospital de Clínicas, por su parte, llevan seis días de paro por haberes adeudados desde julio pasado, lo que generó la postergación de las cirugías programadas, para atender sólo las urgencias. (DyN)