El gobierno nacional empezó a caminar hacia la presentación del plan económico y financiero que exige el Fondo Monetario Internacional (FMI), que sería anunciado el próximo sábado, y que incluirá la definición del presupuesto 2002, que contempla una caída abrupta de la actividad cercana al 5%; un programa monetario que abarca la flotación libre del dólar y la pesificación total de la economía. En este tema, la idea que se impone en el equipo económico es pasar a pesos los depósitos a una paridad de 1,40 y compensar a los ahorrista con un bono que podría volcarse al mercado. Además, se adelantaría el cronograma de devolución.
La confección final del plan económico es seguida de cerca por los técnicos del Fondo que ya están en Argentina. Mañana llegará al país el jefe del organismo para América latina, Claudio Loser, un funcionario de nivel político que dará el OK final al programa. Los máximos dirigentes del FMI, el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) se reunieron ayer en Washington para tratar el caso argentino.
En un hecho inusual, los tres organismos emitieron un comunicado conjunto en el cual se mostraron dispuestos a apoyar a la Argentina y a acelerar el desembolso de unos 2 mil millones de dólares en préstamos que actualmente están suspendidos. Aunque no se aclaró si en la liberación está incluido el crédito del BM para la provincia de Santa Fe, sí se anticipó que se levantará la veda a una serie de programas relacionados con la asistencia social que están en la órbita del BID.
El canciller Carlos Ruckauf, quien ayer inició su visita a Estados Unidos, se atribuyó la liberación de estos créditos. El ministro de Relaciones Exteriores se reunió ayer con el representante comercial de EEUU, Robert Zoellick.
Aunque la información sobre los avances en la construcción del "plan sustentable" que prepara el gobierno se ofrece con cuentagotas -fiel al estilo críptico que caracteriza al presidente Eduardo Duhalde- trascendió que los borradores contemplan:
* Fin de la salida del sistema de cambio dual para avanzar, tal como lo pide el FMI, hacia un sistema de flotación libre.
* Pesificación de la economía. Las deudas se pagarán 1 a 1, siempre con limitaciones en los montos; habrá nuevas normas para los créditos tomados fuera del sistema bancario, y se pesificarán los depósitos al tipo de cambio oficial (más un índice de indexación).
* Se flexibilizará el corralito permitiendo operaciones interbancarias y ampliando la posibilidad de utilizar los fondos inmovilizados para la compra de bienes y servicios. Se estudia, asimismo, la instrumentación de un bono en pesos que puede ser canjeado en el mercado.
El esquema se completa con un presupuesto austero, elaborado sobre la base de una proyección de caída del 5% en el PBI para el año 2002.
Si el FMI aprueba el plan, el gobierno estaría en condiciones de iniciar el mes que viene las negociaciones para recibir una ayuda financiera que, según los primeros cálculos oficiales, superaría los 10 mil millones de dólares.
Salir del laberinto
Respecto a la flexibilización del corralito que prepara el gobierno, los propios miembros del equipo económico no se ponen de acuerdo. Mientras el secretario de Hacienda, Oscar Lamberto, confirmó ayer que se está estudiando la posibilidad de promover la emisión de un bono en pesos a cargo de los bancos y con garantía del Estado para que los ahorristas puedan disponer sus depósitos, el viceministro de Economía, Jorge Todesca, dijo que no había nada al respecto.
Lamberto sostuvo que "los bonos compensatorios que permiten los calces y descalces de los bancos son herramientas que se han utilizado en todo el mundo".
De esta forma, el responsable del área de Hacienda del gobierno se refirió a una medida que las autoridades económicas tienen en estudio y que tiene que ver con las posibilidades de emitir un bono en pesos para posibilitar la devolución de los tenedores de caja de ahorro, cuenta corriente y plazos fijos.
Esta medida tendría por objeto movilizar los fondos hoy inmovilizados en los bancos y dar mayor liquidez a la economía. Además se establecería una ampliación de los movimientos interbancarios entre cuentas para facilitar la compra de distintos bienes y la cancelación de deudas.
Curiosamente, a contramano de esta intención, el BCRA anuló ayer la posibilidad de cancelar saldos de tarjetas de crédito con los fondos de plazos fijos inmovilizados. En tanto, ya se ponen en marcha las excepciones para ahorristas dentro del corralito para sectores que tienen serias dificultades de subsistencia por culpa de los depósitos inmovilizados.
Una caída estrepitosa
El presupuesto 2002 que estaría listo en unos días más será más duro de lo que hasta ahora se preveía. Según informó ayer el gobierno la economía padecerá a lo largo de este año una caída del 5% del PBI y soportará paralelamente una inflación del 15%.
De acuerdo con las previsiones del equipo económico, la economía seguirá en baja durante los primeros nueve meses de este año, por efecto de la salida de la convertibilidad, y volverá a presentar signos de recuperación recién en el período octubre-diciembre.
Todesca afirmó en declaraciones radiales que la Argentina "camina por un desfiladero muy estrecho" porque "de un lado tiene todavía más recesión, y del otro lado el peligro de la hiperinflación".
El proyecto de presupuesto que presentará el gobierno presentará una drástica reducción del déficit fiscal, mantendrá el recorte de 13 por ciento de los salarios estatales y presupone la eliminación del fondo para el incentivo salarial docente. Como dato positivo, ayer se confirmó que incluirá la garantía del pago de aguinaldos y jubilaciones, rechazando las versiones que indicaban lo contrario.
Por otro lado, el equipo económico prevé para este año dejar flotar al peso en relación al dólar, aunque según dijo Todesca, esa medida se adoptará una vez que el gobierno logre cerrar un acuerdo con los organismos internacionales de crédito.
"La flotación tiene que ver con resolver las negociaciones internacionales satisfactoriamente", dijo el funcionario quien aclaró que "uno no sabe qué día y a qué hora eso va a ocurrir, y cuál es el momento en el tiempo en que estaremos en condiciones de tener flotación".
La Ciudad
