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Alimentos y salud

Veo con preocupación en algunos lugares de manipulación de alimentos que no hay gente capacitada profesionalmente. Debería ser obligatorio, para habilitar este tipo de establecimientos, tener un responsable tanto de cocina como bromatológico, para asegurar al consumidor la calidad de los alimentos. Las intoxicaciones se pueden evitar y prevenir. La única arma para esto es la prevención además de las buenas prácticas de autoridades bromatológicas como último recurso. Como consumidores tenemos el derecho y la obligación de exigir alimentos inocuos y sólo se logran cuando en los lugares de producción hay un profesional responsable avalando la cadena de elaboración. Como pasa en las farmacias, que no pueden funcionar sin el farmacéutico matriculado, los restaurantes, cocinas de sanatorios, empresas de comidas y los lugares de expendio de alimentos tales como supermercados, granjas, etcétera, deben contar con un responsable en bromatología. Debemos entender que en los alimentos está la salud y también, en ocasiones, la vida.
Verónica López Nordio