Omar Cardillo volvía de Funes un viernes al mediodía en su automóvil por la autopista Rosario-Roldán. Al pasar por el puente peatonal que está antes de llegar a Circunvalación sintió un fuerte golpe en el parabrisas. Enseguida comenzó a astillarse el vidrio y le quedó un enorme agujero producto de un piedrazo. No atinó a parar y por el espejo retrovisor vio como dos hombres y tres chicos bajaron de la pasarela y se internaron en la villa.
Este es uno de los tantos problemas que se presentan en el primer tramo ya inaugurado de la futura autopista a Córdoba. Es una ruta que está en buen estado, es rápida y muy usada por los automovilistas, principalmente los fines de semana, pero presenta algunos factores de la seguridad a tener en cuenta.
En materia vial, es riesgosa la circulación de ciclistas y peatones por sobre la cinta asfáltica, algo que está prohibido en ese tipo de caminos. Inclusive ya hubo muertos en accidentes por esa causa. La presencia de barrios carenciados sobre ambos costados, desde Circunvalación hasta el límite con Funes, hace que mucha gente cruce o que algunos desaprensivos automovilistas giren en U hacia la otra mano.
Encima falta iluminación en todo el tramo, no hay teléfonos para pedir auxilio y cuando llueve suelen formarse charcos de agua sobre la calzada. La velocidad es otro factor a tener en cuenta. Los que la usan suelen levantar hasta 170 kilómetros por hora, según reconocen, cuando la máxima permitida es 110 km/h.
La autopista a Roldán fue inaugurada el 22 de octubre del 99 y permite unir los dos grandes anillos viales de Rosario, la Circunvalación y la A012. Es la primera parte de la futura doble mano a Córdoba cuyo concesionario, Covicentro SA, está construyendo una nueva etapa entre Roldán y Carcarañá, y deberá en octubre de 2003 terminarla hasta Armstrong.
El tramo Rosario-Roldán sirvió para aliviar de tránsito pesado a la ruta 9 que atraviesa distintas localidades. También es muy usado por los rosarinos que tienen casas de fin de semana en Roldán o Funes. Tiene un tránsito promedio diario de seis mil vehículos durante la semana y más de siete mil los domingos.
¿Por qué algunos no la usan?
Se han registrado hechos similares como el que le pasó a Cardillo. Una fuente policial recordó que hace un mes un auto fue agredido a 50 metros de Circunvalación y la familia fue asaltada. Es que los ladrones aprovechan a refugiarse en las villas linderas.
Desde la concesionaria admitieron que en esa zona se robaron el alambrado colocado para evitar que crucen la ruta. Hoy existe sólo una baranda metálica que es fácil de superar.
Cardillo confesó a La Capital que dejará de usar esa ruta por temor a que le pueda suceder lo mismo, y más de noche. Cree que lo que le pasó "no es un hecho aislado o cosa de chicos".
Son un peligro los ciclistas -que practican ese deporte, van a trabajar o pasean- y los peatones que circulan por allí. "Ya hubo varios muertos desde que se habilitó", comentaron en la estación de peaje. En los últimos dos meses, dos ciclistas fueron arrollados y uno murió.
Más allá de la señalización que hay, otros factores de riesgo son "los automovilistas que giran en U o se cruzan a la otra mano, y la alta velocidad que desarrollan los autos", remarcó Gerónimo Bonavera, de la Fundación Conciencia Vial.
En la empresa reconocen que falta iluminación. Sería mucho más seguro contar con luminarias en los intercambiadores de la Circunvalación y la A012, y en el puente distribuidor de Funes. Dicen que en el proyecto aprobado de la obra la iluminación no estaba incluida.
Sin embargo, los especialistas creen que se trata de una ruta "segura", ya que "es una autopista, sin cruces a nivel y con la calzada en buen estado". Le faltaría pavimentar las banquinas.
Ignacio es un asiduo usuario de esa traza, ya que tiene una quinta en Roldán. Siente que al camino "lo hicieron y ahora que te cuide Dios". Contó que no hay un vehículo de auxilio ni tampoco un teléfono para llamar en el caso de un desperfecto mecánico o de cualquier tipo. Tampoco nunca vio un patrullero transitar por allí. "Hay gente que ya no se anima a usarla de noche por esa cuestión", agregó.
El camino que sigue
En un tiempo más, el tramo Rosario-Roldán se ampliará hasta Carcarañá. La concesionaria Covicentro está construyendo la continuidad de la autopista a un ritmo lento como consecuencia de la crisis económica y los problemas con los pagos que debe realizar el gobierno nacional. Está atrasada en un año con respecto a los plazos acordados y su obligación es terminar la doble mano hasta Armstrong cuando expire el contrato de concesión.
En la futura conexión a Córdoba hay otro tramo ya listo, es el que une la capital mediterránea con Pilar. Entre esta localidad y Villa María, la empresa Benito Roggio empezó otro tramo, pero también a paso lento ya que ese sector se hará con fondos públicos.
Resta definir el tramo Villa María-Armstrong, del que se anunció mucho y se hizo casi nada. Sólo hay un proyecto técnico y una indefinición que viene desde el gobierno de De la Rúa.