Los Cardos.- La tardía llegada de un camión de caudales a un banco de esta localidad, como consecuencia de un desperfecto mecánico, fue el único contratiempo que tuvo una banda de seis delincuente para que el botín con el que se alzó ayer no fuera millonario. Sin embargo, los malvivientes pudieron romper el corralito que aqueja a la Argentina y se terminaron llevando 35 mil pesos de la bóveda de la sucursal del banco Credicoop. Para lograrlo, primero coparon la comisaría del pueblo, donde redujeron a los policías y robaron varias armas; después maniataron al jefe comunal y a una empleada; y concluyeron por encerrar en un baño al personal y los clientes de la entidad asaltada. El modus operandi fue un calco del empleado en dos hechos similares ocurridos en los últimos años en otras localidades del mismo departamento San Martín (ver aparte).
Todo se inició a las 7.45 cuando esta población de 2 mil habitantes empezaba lentamente a tomar su cansino ritmo. Entonces, dos hombres ingresaron a la subcomisaría 4ª con el pretexto de solicitar autorización para la venta ambulante dentro del pueblo. Una vez allí redujeron al comisario Jorge Zamarini y a los suboficiales Miguel Mansilla y Claudio Fogliatto. Al mismo tiempo, otro hombre se encargó de maniatar al juez comunal, Oscar Tramannoni, y a la empleada del Registro Civil, Raquel Ocampo, quienes trabajaban en el edificio lindero a la seccional.
Todos fueron maniatados y amordazados con cinta de embalar y alojados en distintas dependencias de la seccional, donde quedaron bajo la custodia de dos de los delincuentes. Los demás hombres de la gavilla se trasladaron hacia el banco, ubicado a dos cuadras de la comisaría, mientras coordinaban sus movimientos por medio de modernas radios VHF.
Una vez en el banco, los malvivientes ingresaron al pequeño edificio con el argumento de vender servicios mutuales y solicitaron entrevistarse con el gerente, Marcelo Cinquini, quien poco después de atenderlos también fue reducido junto a los tres empleados de la entidad, el suboficial de guardia Esteban Gómez y los cinco clientes que estaban en el interior del banco.
Después todo fue fácil. Cargaron el dinero de las cajas y la bóveda y se fueron. Claro que antes encerraron a todas sus víctima bajo llave en el baño del local.
Con el botín en su poder, los delincuentes avisaron a los cómplices que estaban en la comisaría de que todo había terminado. Entonces, antes de salir de la seccional, quienes custodiaban a los rehénes se apoderaron de una pistola calibre 45, dos revólveres 9 milímetros y dos pistolas ametralladoras.
Tras ello, la banda huyó en un Renault Clío y un Fiat Duna que habían sido robados el domingo en Córdoba. Ambos autos aparecieron abandonados poco más tarde en un maizal, a 4 kilómetros al norte de Los Cardos donde, según los rastros, se habrían pasado a una camioneta 4 x 4 en la que huyeron hacia la vecina provincia.
Según los investigadores, los delincuentes habrían escapado por la ruta provincial 66 hacia Córdoba, a la que se puede acceder desde Los Cardos por la ruta provincial 13 o por caminos alternativos de tierra.
Pedro Aquiles, un hombre de 80 años que llegó al banco para pagar su factura telefónica en el momento en que estaban abriendo la bóveda, dijo que al entrar se encontró con un joven que le indicó qué debía hacer. "Al principio supuse que era una broma, después me empujó, me pidió que esté tranquilo y me encerró en el baño junto a los demás", dijo el anciano que se salvó de que le roben la billetera porque la llevaba en el bolsillo de la camisa, detrás de un pañuelo de mano. A los demás los despojaron de sus pertenencias.
El blindado no llegó
Poco después de que los ladrones se fueron del banco, llegó al Credicoop un camión de caudales de la empresa Prosegur que, según versiones, movilizaba fondos para el pago de los empleados de la aceitera que Agricultores Federados Argentinos posee en la localidad y para otras entidades bancarias. Se calcula que el total del dinero transportado se aproximaba al medio millón de pesos. El vehículo debía llegar alrededor de las 7.30, pero se demoró debido a una rotura cuando circulaba entre Las Rosas y Los Cardos.
Por otra parte, según el presidente comunal Carlos Alberto Coppari, en la entidad bancaria había alrededor de 10 mil pesos que estaban destinados al pago de aguinaldos del personal comunal.