Unos 60 hemofílicos y familiares se encadenaron ayer al mediodía a las puertas de la Fundación de la Hemofilia para intentar evitar el cierre de la institución, ante la "falta total de medicamentos" y exigir que las obras sociales paguen sus deudas. Roberto Vázquez, integrante de la fundación ubicada en Soler y Billinghurst de esta ciudad, indicó que la entidad "está a punto de cerrar porque Ioma y Pami no están pagando".
Las deudas que las obras sociales mantienen con la asociación ascenderían a "unos cuatro o cinco millones de pesos", afirmó Vázquez. "Hay 1.700 hemofílicos sin medicación", aseguró, y a ellos se suma el "problema de los chicos con HIV, que no reciben los cócteles" correspondientes.
"Razones humanitarias"
En tanto, la Justicia liberó ayer del corralito a una empresa que utiliza insumos de origen extranjero para fabricar productos para tratamientos de hemodiálisis -como agujas y guías de suero- indicaron en la tarde de ayer fuentes judiciales en los tribunales porteños.
En base a un fallo de la Corte Suprema que permitió retirar depósitos en casos de "razones humanitarias", la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal de la Capital Federal hizo lugar a la medida cautelar de Industrias Cas S.R.L. y ordenó la suspensión del decreto 1570/01 "en cuanto prohíbe transferencias al exterior", explicaron los voceros. La empresa fabrica tubuladuras, guías de suero, agujas para fístulas y diversos kits para hemodiálisis.
Desde fuentes judiciales se explicó \que para los jueces las trabas para pagar los elementos que importa la empresa "lleva a dos mil pacientes crónicos renales irremediablemente a la muerte". (DYN)