Ramala. - El jefe del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), Ahmed Saadat, cuya organización reivindicó el asesinato del ministro de Turismo israelí, Rehavam Zeevi, el pasado 17 de octubre, fue arrestado ayer por miembros de la policía autónoma palestina. Previamente y tensando aún más la maltrecha tregua, palestinos armados mataron a tiros a dos israelíes aparentemente en venganza por la muerte de un militante requerido por Israel por su presunta participación en un atentado explosivo. Funcionarios israelíes dijeron que un colono de 72 años con pasaporte estadounidense fue acribillado en las afueras de Belén y una mujer murió a balazos horas más tarde cerca del asentamiento judío de Givat Zeev, cinco kilómetros al norte de Jerusalén.
Pero la noticia del arresto de Saadat ganó protagonismo sobre la muerte. El líder palestino, de 48 años, es una de las condiciones puestas por el premier israelí, Ariel Sharon, para autorizar al presidente Yasser Arafat a abandonar la cisjordana Ramalá, donde está confinado desde el pasado 3 de diciembre por el ejército de Israel. Saadat, el dirigente palestino de mayor rango arrestado por la Autoridad Nacional Palestina (ANP), fue electo para encabezar el FPLP el 3 de octubre, reemplazando a Abu Alí Mustafá, asesinado el 27 de agosto en un ataque de helicópteros israelíes cuando estaba en su oficina de Ramalá. Posteriormente, un comando de cuatro hombres del FPLP asesinó al ministro de Turismo para vengar a Mustafá.
EL FPLP es uno de los principales componentes de la OLP, donde constituye la oposición de izquierda a Arafat, y desde su fundación en 1967 por Georges Habache, un cristiano palestino, impulsa una dura estrategia de confrontación con Israel pero se diferencia, desde posturas laicas, del fundamentalismo islámico.
Dos muertos y promesas de violencia
Por otra parte, las Brigadas de Mártires de Al-Aqsa, importante facción de Al Fatah, se adjudicó la muerte de un civil israelí de 72 años. "Nuestras heroicas tropas en Beit Sahour dispararon contra un sucio agente israelí, lo que provocó su muerte inmediata", expresó en un comunicado las Brigadas de Mártires Al-Aqsa, refiriéndose a una aldea cerca de Belén, bajo gobierno palestino. Un portavoz del gobierno israelí negó que el hombre fuera un agente. La policía identificó a la víctima como Avi Boaz, quien nació en Israel y vivía en el asentamiento de Maaleh Adumim.
"Esta es otra, aunque no la última, respuesta al asesinato del mártir Raed el-Karmi", dijeron las Brigadas. Karmi, a quien Israel acusaba de la muerte de nueve de sus ciudadanos, falleció el lunes tras la explosión de una bomba en la ciudad cisjordana de Tulkarm.
Horas después de la muerte de Boaz, dos palestinos armados se acercaron a un auto cerca de una estación de gasolina en la entrada de Givat Zeev y abrieron fuego a quemarropa, matando a una mujer del asentamiento e hiriendo a otra, dijo un funcionario israelí de seguridad. Nadie se responsabilizó de inmediato por el ataque, perpetrado en una carretera que atraviesa Cisjordania y conecta a Jerusalén con Tel Aviv.
El lunes, las Brigadas afiliadas a la facción Al Fatah, del líder palestino Yasser Arafat, mataron a un soldado israelí e hirieron a un oficial en un primer ataque de represalia, horas después de que Karmi murió en la explosión. Una fuente de Al Fatah había expresado horas antes que ninguna facción de la organización rompería el pacto de cese el fuego pedido por Yasser Arafat.
En tanto, el brazo armado del movimiento radical islámico Hamas amenazó ayer con realizar nuevos atentados contra israelíes en el caso de que el Estado judío mantenga el bloqueo de movimiento impuesto a Arafat. En caso de mantenerse el bloqueo, el brazo armado de Hamas -Izel El Dien El Kassam- podría no sólo violar el alto el fuego, sino también concretar su propuesta para la creación de un ejército nacional palestino que otorgue "seguridad" al pueblo, "defienda sus derechos y diseñe un plan para la continuación de la Intifada". (Télam, Télam y DPA)
La Ciudad
