Un grupo de taxistas y remiseros de Rosario se movilizaron ayer a la mañana a la sede central del Banco Municipal para pedir una refinanciación de los créditos prendarios otorgados para la renovación de las unidades. Es que debido a la crisis económica y a la caída de un 50 por ciento de la recaudación, según argumentaron, se les hace "imposible" pagar las cuotas de los préstamos y en ciertos casos adeudan hasta seis pagos. El presidente de la entidad crediticia, Daniel Pavicich, prometió que se estudiará "caso por caso" y será flexible con aquellos en que los atrasos no sean mayores a los 5 meses.
Los manifestantes también expresaron su preocupación por el hecho de que la pesificación no alcanza a la totalidad de sus obligaciones ya que los créditos superan los 15 mil pesos permitidos por la ley vigente. A lo que Pavicich, les llevó tranquilidad en el sentido de que "en principio" las deudas serán pesificadas ya que "se los considera como servicio público" y para ese rubro no habría topes a la hora de desdolarizar los créditos.
En cuanto al incumplimiento de las cuotas, los titulares de licencias de taxis y remises dijeron que si no pagan, la Dirección de Transporte municipal no los autoriza a seguir trabajando. Frente a esto, el banquero respondió que se tolerará a los casos cuyas deudas no superen los 150 días.
El Banco Municipal otorgó unos 300 créditos prendarios a taxistas y remiseros de la ciudad para renovar sus autos. Estos son pagados en 60 meses y con una tasa de interés del 19 por ciento.
Ayer, una caravana de remises y taxis se concentró en el parque Alem y después partió hacia la sede del banco. En plena city rosarina, los manifestantes, con su habitual uniforme de camisa con corbata y sin saco, hicieron sonar sus bocinas y golpearon sus manos. Y luego fueron recibidos por las autoridades.
Pidieron la refinanciación de los créditos o bien que las cuotas adeudadas se pasen al final del plan de pagos como para "intentar volver a empezar", dijo uno de los choferes.
Dieron cuenta de una crítica situación económica del sector con una caída en la recaudación del 50 por ciento durante el último año y una profundización de la situación desde diciembre.
Ni para cubrir los gastos
Mario, dueño de un remís Peugeot 404, contó que está pagando un crédito de 23 mil dólares con cuotas de unos 700 pesos más el seguro y dijo que tuvo que dejar de abonar porque el dinero que recauda por mes no le alcanza "ni siquiera para cubrir los gastos".
Un empresario del rubro comentó que un remisero debe facturar unos 120 pesos diarios para solventar los costos y quedarse con unos 700 pesos al mes. Hoy la recaudación oscila los 35 pesos por día.
Generalmente, un taxi o un remís es trabajado por uno o dos choferes quienes deben pagar, además de la cuota del crédito, los gastos que genera un vehículo (seguro, patentes) y el alquiler de la frecuencia para trabajar en una empresa.
Como Mario hay unos 70 u 80 titulares con el mismo problema. "Hay algunos que ya hace seis meses que no pueden pagar", agregaron.
Pavicich dijo que del total de los préstamos otorgados, el 82% está casi al día, un 17% tiene deudas menores a los cinco meses y el resto presenta una mora superior a ese límite. Para estos casos, adelantó que no habrá contemplaciones.