Convocaron a otro "ollazo" en contra de la Corte Suprema

La Asociación de Abogados Laboralistas convocó ayer a un nuevo cacerolazo para pasado mañana con el fin de exigir la renuncia de los miembros de la Corte Suprema de Justicia, mientras que en el Palacio de Tribunales se volvieron a instalar decenas de gendarmes, con cajones que decían "explosivos", para garantizar la seguridad del edificio.
"La permanencia de los actuales integrantes de la Corte es absolutamente incompatible con la nueva etapa histórica que transita nuestro país. Representan el viejo orden social que debe morir. Y la sociedad argentina en su inmensa mayoría no los quiere más", dijo el presidente de la agrupación, Luis Enrique Ramírez.
A través de un comunicado, Ramírez aseguró además que los ministros, "atornillados en sus sillones, dan una imagen patética y lamentable" y se quejó porque (los ministros) "pretenden desoír el clamor de un pueblo, cuyos derechos han avasallado una y otra vez".
Así, bajo la consigna "sin Justicia no hay libertad ni derechos", la Asociación de Abogados Laboralistas sostuvo que "la gente tiene que salir a la calle a manifestarles su repudio y a exigirles que dejen su lugar a jueces idóneos, honrados e independientes".
Y convocó a una manifestación frente a Talcahuano 550 para pasado mañana, a las 17.
Ante el temor a esas protestas, los grandes portones de hierro de ingreso al Palacio de Tribunales amanecieron ayer con unas nuevas trabas de seguridad y personal de Gendarmería se instaló nuevamente en distintos sectores del edificio, junto cajas que decían "explosivos".