Los cacheños reciben a sus visitantes con una semana a todo Cachi, en una de las ciudades más fascinantes de los valles Calchaquíes salteños. Ayer comenzaron las actividades de turismo de aventura, puestos de comidas regionales y un festival folclórico, en programa que finalizará el sábado próximo.
La Semana de Cachi incluye una feria de comidas artesanales y artículos regionales, para que los turistas se deleiten con platos típicos y sabrosos como empanadas, cabritos y tamales.
También se han organizado cabalgatas, caminatas y travesías en vehículos pesados, además de bicicleteadas y excursiones por los ríos Cachi y Calchaquí. "Les ofrecemos lo que para nosotros es parte de la vida cotidiana", apuntó un viejo poblador.
El viernes y sábado venideros tendrá lugar una nueva edición del Festival de la Tradición Calchaquí, en el que actuarán Horacio Guaraní y, entre otros los grupos locales, Vale 4, Los Sauzales, Las Voces de Orán y Viviana Careaga.
Siglos de tradición
Cachi fue fundada en 1655 por mandato del gobernador Gonzalo Abreu y Figueroa. Su nombre significa Tierra de la Sal, y actualmente es una ciudad de calles empedradas, veredas altas, bajas casonas coloniales y una plaza cercada con pircas.
Con algo más de 7.200 habitantes, esta ciudad se destaca por su iglesia del siglo XVIII, declarada monumento histórico nacional, y por el Museo Arqueológico Pío Pablo Díaz, que concentra 10.000 años de la historia del lugar en las 5.000 piezas que exhibe.
Está a 157 kilómetros de la capital salteña y a unos 2.280 metros de altura sobre el nivel del mar, atravesada por los ríos Cachi y Calchaquí.
Para llegar desde la ciudad de Salta hay que tomar la ruta nacional 68 y luego la provincial 33 que pasa por la quebrada de Escoipe y la recta de Tín Tín, un trazado de doce kilómetros a los 3.000 metros de altura que construyeron los incas. También se pasa por el parque Los Cardones, el Valle Encantado y la Cuesta del Obispo, un camino de veinte kilómetros que llega hasta la Piedra del Molino, casi a los 4 mil metros de altura.
Más adelante aparece el nevado de Cachi y las ruinas de las Pailas y Puerta La Paya, con sus yacimientos arqueológicos, tumbas antiguas, murallas y construcciones incaicas.
Para alojarse está la hostería Sol del Valle, de la red del Automóvil Club Argentino, y la Casa del Molino, atendida por sus dueños, además de varios hoteles y un camping municipal.