-¿En qué consisten los shows?
-Muestro la realidad. Todo lo que hago representa algo que existe, pero que en general permanece oculto, y me gusta que la gente pueda interpretar los signos del espectáculo. Tengo 24 años y desde muy chica comencé a vincularme con ambientes de mentalidad amplia, lo que me permitió acercarme a otras realidades, ni mejores ni peores, pero a las que mucha gente no tiene acceso. Me interesó trabajar a partir de comunicar lo que no es evidente.
-¿Quiénes te acompañan?
-En este momento hago sobre todo coreografías en las que bailo con un grupo de quince bailarines, entre chicos y chicas, además de transformistas y drag queens, siempre con mi estilo personal.
-¿Cómo definís tu estilo?
-Es algo bastante transgresor. Trabajo en toda clase de boliches, pero tiene la particularidad de que siempre es mejor aceptado en los boliches gay. Puede incluir insinuaciones lésbicas, homosexuales o heterosexuales, pero en esos lugares nada de lo que pueda hacer resulta chocante.
-¿Qué entendés por transgresión?
-Es ir más allá de los prejuicios y tener la libertad de que no haya límites ni personales ni impuestos por los demás; es jugar con esas aristas que generalmente la sociedad en algún punto soslaya, siempre expresando las cosas artísticamente, pero sin censuras.
-¿Cuánto hace que bailás?
-Soy de Armstrong, pero hace siete años que estoy en Rosario. Empecé dando clases de salsa y merengue. Desde los cinco años hago ballet y después seguí el profesorado de danzas latinoamericanas. Una vez en Rosario, di clases de salsa, y después empecé con los shows, donde suelo incluir algún strip tease, acompañada de coreografías con drag queens.
-¿Qué te atrae de esta singularidad de tu trabajo?
-La libertad de expresión que existe; el público no tiene estructuras ni tabúes; especialmente en el caso de que se incluya un desnudo se lo ve como algo artístico. Por ejemplo, en un boliche de ambiente exclusivamente hetero, un desnudo no tiene el mismo significado. En los otros lugares, aunque el público sea mixto, la mentalidad es otra. Pueden opinar sobre la calidad del espectáculo, pero habitualmente no prevalece el prejuicio de que un desnudo implica nada parecido a prostitución. Es más, trabajando con gays aprendí a producirme.
-¿Cómo se entiende que un hombre te enseñe a acentuar tu feminidad?
-Vengo de un pueblo donde las estructuras sociales son más estrechas. Por otra parte, una mujer, normalmente, por más que se arregle no anda con plumas, y yo empecé a descubrir mi personalidad a partir de que llegué a Rosario y me encontré con una mayor amplitud.
-¿Qué proyectos tenés para el futuro?
-Hoy vivo en Miami donde obtuve la visa de artista. La idea es volver siempre a mostrar trabajos y montar otros espectáculos. En Miami estoy con un contrato de trabajo. Además de profundizar lo que sé, existe el proyecto de un trabajo en una comedia musical y de llevar un show a Las Vegas. Siempre aposté a lo artístico y el nivel con que lo hagas determina si es arte o no.
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"Transgredir es ejercer la libertad de expresión". |  | Ampliar Foto |  | |
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La Ciudad
