El ex presidente boliviano Hugo Banzer enfrenta por primera vez en dos décadas la posibilidad de ser procesado por los delitos de la dictadura que encabezó en los 70 y corre el riesgo de ser arrestado, igual que otros ex gobernantes militares de los países del cono sur de América.
Banzer, de 75 años, es solicitado por la Justicia de Argentina para que responda al proceso contra el Plan Cóndor, el mecanismo de los regímenes militares de Argentina, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay, similares al que implantó en su país con respaldo del Ejército.
La acusación está abierta también contra los ex presidentes Rafael Videla, de Argentina; Augusto Pinochet, de Chile, y Alfredo Stroessner, de Paraguay, por los supuestos delitos de asociación ilícita y privación de la libertad.
En el proceso se pretende castigar a los responsables del supuesto asesinato de seis ciudadanos argentinos desaparecidos en Bolivia y de 40 bolivianos desaparecidos en Argentina entre 1975 y 1977.
La extradición del ex gobernante fue solicitada por el juez federal Rodolfo Canicoba Corral, quien también ordenó a Interpol la captura del acusado.
Banzer se convirtió a demócrata tras su caída en 1978, fundó un partido político (Acción Democrática Nacionalista, ADN) y participó en siete elecciones presidenciales hasta ganar el poder legal, en 1997.
Es la primera vez en poco más de veinte años que se enfrenta a la posibilidad de estar ante un juez.
La primera y única vez fue en 1979, cuando el desaparecido diputado socialista Marcelo Quiroga Santa Cruz propuso al Congreso boliviano instaurar un juicio de responsabilidades por delitos económicos y violación de libertades individuales durante los siete años de la dictadura.
La acusación parlamentaria fue archivada, tras una férrea defensa de los legisladores del partido fundado por Banzer, ADN, cuando el país sufrió un nuevo golpe militar, en 1980.
El acusador es uno de los políticos desaparecidos en Bolivia, durante la dictadura de Luis García Mesa, y sus restos aún son buscados por una decisión parlamentaria.
A fojas cero
La viuda de Quiroga Santa Cruz, Cristina, recordó a la prensa local que, en realidad, "el juicio (contra Banzer) nunca comenzó ni se hizo" por la protección que le dan sus actuales vínculos políticos.
Los familiares del ex presidente y los dirigentes de ADN sostienen que el Congreso boliviano sobreseyó a su actual líder en un proceso en el que "se demostró su inocencia", según dijo su hija Patricia.
En cambio, la Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Bolivia ha anunciado que entregará al juez pruebas de la culpabilidad de Banzer en el arresto, tortura, asesinato y entrega ilegal de personas a gobiernos extranjeros.
El ex gobernante, enfermo de cáncer pulmonar desde julio pasado, insiste en que no fue dictador y alega que, en los primeros dos años de ese período, fue controlado por los partidos políticos que le respaldaron, el Movimiento Nacionalista Revolucionario y Falange Socialista Boliviana.
La Ciudad
