Salta.- Buzos policiales seguían buscando ayer a dos personas desaparecidas la noche de viernes, cuando se dio vuelta un catamarán con 15 tripulantes que habían salido a pescar en el dique salteño Cabra Corral. A raíz del accidente, murieron tres hombres, entre ellos el dueño de la embarcación.
Los buzos trabajaban ayer en el paraje El Saladillo del dique Cabra Corral, a 75 kilómetros de la capital salteña, en lugar conocido como "Los Canguros". El viernes, a las 21.30, se dio vuelta en ese lugar el catamarán Bucanero, propiedad de Mario García, que había partido a pescar. Dos de las personas que sufrieron el accidente aún permanecen desaparecidas.
Personal de la dependencia de la localidad de Coronel Moldes y de la División Lacustre están abocados a la búsqueda de las personas desaparecidas.
Según el secretario de Seguridad de Salta, Gustavo Ferraris, momentos después de partir "las condiciones climáticas desmejoraron y el propietario de la embarcación, que la comandaba, decidió anclarla".
Atrapados
En ese instante, fuertes ráfagas de viento huracanados que "golpearon de costado al catamarán lo dieron vuelta con una rapidez inusual y las víctimas quedaron atrapadas en la cabina", explicó Ferraris, quien agregó que "ya fueron rescatados tres cuerpos y todavía hay dos desaparecidos".
La jueza de Instrucción Sumaria de Quinta Nominación, Beatriz Renzi de Gato, tomó intervención en el caso y ordenó la realización de la autopsia a los tres cadáveres, que fueron trasladados a la morgue del hospital San Bernardo, de la ciudad de Salta.
Las personas fallecidas son Juan Sánchez, de 48 años, y Raúl Sebastián Rodríguez, de 58, además de Mario García, propietario del catamarán.
Rodríguez prestaba servicio en la Dirección Municipal de Tránsito y que concurrió a la excursión de pesca junto a cuatro compañeros de trabajo, de los cuales tres no se animaron a subir a la nave y se salvaron del accidente.
El secretario de Seguridad provincial indicó además que el resto de los pasajeros del catamarán resultaron "ilesos", y comentó que la embarcación "se dio vuelta pero siguió flotando, por lo que esta gente logró subir y desde ahí pedir auxilio".
La demanda de socorro fue escuchada por los tripulantes de un velero que los rescataron.
Al ser consultado sobre el estado de la embarcación, Ferraris explicó que se trataba de un catamarán "con apenas cuatro meses de existencia" y que "cumplía con todas las pautas de seguridad necesarias". Y remarcó que "las características del viento eran imposibles de prever".
Según los voceros, la jueza determinó no brindar el resto de las identidades, mientras que las actividades acuáticas en el embalse, que es el segundo en tamaño del país y la reserva hídrica más importante del norte argentino, quedaron suspendidas durante esta jornada, a causa de condiciones climáticas adversas. (Télam)
La Ciudad
