| | Reabrirán la causa contra un ex dirigente por homicidio
| Buenos Aires.- La Cámara del Crimen revocó el sobreseimiento del ex dirigente de fútbol Francisco Ríos Seoane y dispuso que prosiga el trámite de la causa penal que se le instruye por el presunto delito de homicidio, dijeron fuentes judiciales. La decisión judicial, que echó por tierra dos sobreseimientos dictados anteriormente tanto en primera instancia como en la Cámara del Crimen, vuelve a poner al polémico ex presidente de Deportivo Español ante la posibilidad de enfrentar una condena por homicidio. Ríos Seoane, quien también enfrentó causas judiciales por evasión impositiva, llegó a estar encarcelado bajo la acusación de ser el instigador del asesinato del dirigente del club Deportivo Español Ignacio Torres, opositor a su conducción. El 24 de mayo de 2000 el juez de instrucción Gustavo Karam había dispuesto el sobreseimiento de Ríos Seoane como presunto "autor intelectual" del crimen. Esa resolución fue convalidada el 17 de agosto del mismo año por la Sala V de la Cámara del Crimen, pero los abogados de Julia Cabrera, la viuda del dirigente asesinado, apelaron en casación. A través de sus abogados Antonio Liurgo Boianello, Marcelo Parrilli y Alfredo Montes, la querellante presentó un recurso de queja ante la Cámara Nacional de Casación y el máximo tribunal de la órbita penal ordenó que se dictara un nuevo fallo. Tomó intervención la Sala VII de la Cámara del Crimen, que concluyó que existen medidas pendientes, como el entrecruzamiento de llamadas telefónicas de testigos, previo al homicidio. Los camaristas Abel Bonorino Peró y José Manuel Piombo consideraron, además, que correspondería ordenar careos entre testigos e imputados, tal como lo pidieron los abogados de la querella. En el sumario, que volvió al juzgado de instrucción de Gustavo Karam, se investiga el homicidio de Torres, un opositor político a Rios Seoane, quien el 20 de julio de 1994, cuando se hallaba en su bar El Rincón de Torres, ubicado a sólo 50 metros del Club Deportivo Español, el barrio de Flores, de la Capital Federal, fue rociado con combustible y luego prendido fuego. La víctima recibió múltiples heridas en más de dos terceras partes de su cuerpo que, cinco días después, provocaron su muerte cuando se hallaba internado en el Instituto del Quemado de esta capital. El sindicado autor material sería Roberto Bravo Llano, un pintor boliviano que trabaja en el Hospital Español y a quien la querella le atribuye haber cumplido instrucciones de Ríos Seoane. La decisión de proseguir la pesquisa comprende también a Bravo Llano, a su superior Eduardo Parcelo (presunto partícipe del hecho) y Fernando Loureiro, ex chofer de Ríos Seoane, quien habría proferido amenazas a Torres. (Télam)
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