Un niño de 12 años murió y otros dos de 11 y 14 resultaron heridos al estallarles un artículo de pirotecnia "de dos etapas", que ya había sido utilizado -aunque la primera vez sólo había funcionado el mecanismo de propulsión-, durante los festejos de Año Nuevo en la ciudad bonaerense de Luján.
Sobre el mediodía del martes pasado tres niños encontraron un artefacto de pirotecnia que no había estallado en su totalidad -sólo había consumido el sistema de elevación- y cuando lo quisieron hacer detonar, al parecer con otros petardos, voló y les causó heridas a dos y la muerte del restante.
Claudio Ramírez tenía doce años y murió en una clínica privada, mientras que los otros dos chicos recibieron esquirlas en el cuerpo pero están "fuera de peligro", en tanto ayer se investigaba la procedencia del artefacto. El niño sufrió la amputación de la mano derecha, una lesión en la región abdominal, además de graves heridas en el cuello, por lo que fue derivado de urgencia a una clínica de la ciudad de Luján, donde a poco de ingresar murió.
Ramírez falleció en la clínica de un shock hipobulémico por la cantidad de sangre que perdió, lo que le causó un paro cardiorrespiratorio traumático, detallaron fuentes de la clínica.
Hallazgo fatal
El accidente ocurrió al mediodía del primer día del año frente a una casa de la calle Gutiérrez al 3700 del barrio Constantini de la localidad de Jáuregui, en el partido de Luján, 69 kilómetros al oeste de la Capital Federal. A esa hora, tres chicos salieron a jugar y encontraron en la calle un artefacto de pirotecnia que el jefe de la Delegación de Investigaciones de Mercedes, comisario Inspector Miguel Casafus, calificó como "de dos etapas".
"Al encenderlo se produce una primera explosión y el cohete se eleva hasta unos 20 o 30 metros de altura -explicó-, allí se produce una segunda detonación que libera los fuegos artificiales". Casafus indicó que "el cohete cayó sin detonar la segunda etapa y los chicos -sin tomar conciencia del peligro- le fabricaron una mecha casera e intentaron hacerlo estallar en el piso", agregó. "El artefacto está recubierto con una carcaza de plástico, y al explotar, las esquirlas se incrustaron en la garganta del chico. Esto le provocó una hemorragia y la muerte casi instantánea", detalló el investigador.
Las esquirlas o pedazos de plástico alcanzaron a los otros dos chicos, quienes fueron atendidos y se encontraban ayer fuera de peligro, según informaron fuentes policiales. "La División Policía Científica está a cargo de las pericias, pero aún no tenemos información acerca de si se trataba de un artefacto de venta permitida o era pirotecnia de procedencia ilegal", comentó Casafus.
Investigan si era legal
El caso quedó al principio a cargo del fiscal de instrucción de Mercedes, Juan José Minetto, quien giró la causa al juez de Menores local, Luis Torcoletti, por considerar que "no hay ningún mayor involucrado en el hecho" ya que se caratuló como "muerte por accidente y lesiones". El subcomisario José Losada, a cargo de la seccional Nº 2 de Luján, con jurisdicción en la zona, anticipó que rastrearán el origen del artefacto "para saber si era legal o ilegal". (Télam)