Violento atraco en un comercio de Riccheri al 1000

Roban supermercado y al huir se tirotean con un custodio

Cuatro delincuentes se alzaron con $1.000. Empleados y clientes se salvaron de una lluvia de balas

El sábado a la noche, los clientes de un supermercado del macrocentro rosarino que realizaban sus compras de fin de año quedaron atrapados en medio de un tiroteo cuando el vigilador privado del comercio se enfrentó a balazos con cuatro ladrones que se habían alzado con mil pesos de la recaudación. A pesar de que tres proyectiles perforaron el frente del autoservicio nadie resultó herido y, en medio de una lluvia de balas, los maleantes escaparon con la recaudación del negocio.
Según indicó un empleado del comercio robado, todo se inició a las 21 del sábado en el supermercado Royalin, de Riccheri 1050. El local es propiedad del ciudadano chino Lin Suzhu, de 41 años, quien abrió el comercio hace dos años y no estaba en el lugar al producirse el episodio.
A la hora mencionada unos 30 clientes realizaban sus compras de fin de año cuando irrumpieron dos hombres armados con pistolas 9 milímetros. Los otros ladrones se quedaron afuera oficiando de campana, según las fuentes.
"Le apuntaron con el arma al cajero y le sacaron la recaudación", explicó Leo, un empleado del supermercado. Mientras esto ocurría, Jorge Benítez, un custodio de una agencia de seguridad privada recorría las góndolas. Al percatarse de lo que sucedía frente a las cajas, el vigilador intentó impedir que los ladrones escaparan con el dinero de la recaudación. Pero no tuvo tiempo de acercarse a los maleantes.
Los delincuentes ya estaban en la vereda y desde allí abrieron fuego ante la mirada atónita de los cuatro empleados y de los clientes que sólo atinaron a tirarse al suelo para protegerse de los balazos mientras el custodio, desde el interior del local, disparaba contra los huidizos asaltantes.
Así las cosas, se produjo el momento de mayor tensión. "Los tipos estaban muy nerviosos. Hubo un tiroteo muy intenso, pero por suerte nadie resultó herido", comentó Leo, aunque tres proyectiles perforaron la parte inferior de la puerta de aluminio, un cristal y la pared del frente del supermercado.
En medio del tiroteo, los cuatro maleantes escaparon corriendo con rumbo desconocido y con el botín en su poder, unos mil pesos. "Se llevaron la recaudación de la tarde", explicó.
Por otra parte, Leo describió a los asaltantes como "jóvenes de entre 22 y 25 años" y señaló que es el primer robo a mano armada que sufrió el comercio desde que abrió hace dos años.

Las balas perforaron la puerta y la pared del frente.