cartas

Pérdidas de las revueltas rosarinas

Luego del sueño de don Bosco sobre la "misión Patagonia" llegaron a nuestras tierras sacerdotes salesianos que desplegaron una gran actividad. Claudio Lepratti, un joven de 23 años, ingresó en el seminario de Funes. Cuando terminó fue a vivir junto a la conocida obra del padre Edgardo Montaldo. Además de realizar un verdadero apostolado salesiano trabajaba por un miserable sueldo en la cocina centralizada. Sus únicas armas eran su gran sonrisa y su fiel solidaridad con el prójimo, especialmente con los pobres y de entre ellos con los más necesitados. Una de estas recientes revueltas que vivimos en esta ciudad acabó con su vida, cuando se encontraba en una escuelita del barrio sur que posee un comedor para carenciados. Tuve la oportunidad de conocerlo y somos muchos los que lo recordamos y lamentamos la pérdida de este gran valor humano, que será contado como mártir de la solidaridad salesiana.
Alejandro Bogado