Año CXXXV
 Nº 49.345
Rosario,
domingo  30 de
diciembre de 2001
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Dos policías salvaron a una beba de 14 meses
Se había asfixiado tras caer a un balde con agua. La rescató una patrulla del Comando Radioeléctrico

Dos policías del Comando Radioeléctrico lograron salvarle la vida a una beba de 14 meses que había sufrido una asfixia por inmersión al caer de cabeza dentro de un tacho con agua. La criatura había perdido sus signos vitales y su cuerpo ya había tomado un color violáceo. Los uniformados tuvieron que efectuarle maniobras de resucitación mientras la trasladaban a un centro asistencial en un patrullero, pero la situación se transformó en crítica cuando el desplazamiento del vehículo policial se vio interrumpido por el paso de un tren.
La historia con final feliz comenzó el viernes, aproximadamente las 20.30, y culminó con la pequeña Nair Belén Gómez internada pero fuera de peligro en el Hospital de Niños Víctor J. Vilela. Los otros dos protagonistas fueron el sargento Gustavo Martínez y el agente Sergio López, quienes cumplían con un patrullaje de rutina por la zona norte a bordo del móvil 2.212 cuando se encontraron con un dramático cuadro.
Los policías se cruzaron en Anchoris y Palestina con un Fiat Uno que se desplazaba a alta velocidad. Según fuentes de la Unidad Regional II, los agentes hicieron detener el vehículo y se encontraron con Yanina González, de 17 años. La chica llevaba en brazos a la pequeña Nair, su hermana de 14 meses, desvanecida y con un alarmante color violeta. Desesperada, Yanina les contó a los agente que la beba había caído de cabeza dentro de un tacho con agua y había permanecido en esa posición durante varios minutos sin que sus familiares se hubieran dado cuenta.
Martínez y López comprobaron que los signos vitales de la criatura prácticamente habían desaparecido. No presentaba movimientos respiratorios y su corazón no latía. Entonces decidieron cargarla en el patrullero y trasladarla de urgencia al Hospital Alberdi haciendo sonar la sirena. Pero como el estado de la menor era desesperante uno de los uniformados comenzó a efectuarle maniobras de reanimación.
Cuando estaban en esa tarea y en pleno trayecto hacia el hospital se produjo otro momento de tensión. Ocurrió cuando el automóvil llegó al paso nivel que cruza calle Baigorria y que pertenecía al ex ferrocarril Belgrano. El patrullero estuvo cinco minutos varados a la espera de que terminara de pasar un convoy de carga. Durante ese tiempo se intensificaron los masajes cardiorrespiratorios.
Fue entonces cuando la beba experimentó los primeros síntomas de reanimación: vomitó gran cantidad de agua y estalló en llanto. Recién en ese momento los policías y la hermana se sintieron aliviados. Finalmente el patrullero llegó al Hospital Alberdi, donde los médicos diagnosticaron que Nair sufrió ahogamiento con reanimación. Posteriormente, y ya junto a su madre la criatura fue derivada al Hospital de Niños Vilela.


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