Año CXXXV
 Nº 49.345
Rosario,
domingo  30 de
diciembre de 2001
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Buceo: Viaje al fondo del mar
Barreras de corales, fauna marina y barcos hundidos esperan ser descubiertos en las profundidades

Saúl A.Isacson

La práctica del buceo es un deporte que creció vertiginosamente en los últimos años. Cada vez es mayor la cantidad de personas que se interesan por aprenderlo para poder disfrutar el maravilloso mundo submarino.
Para bucear es indispensable un entrenamiento adecuado, que se brinda en cursos especializados. A través de clases teóricas y prácticas se aprende lo suficiente para entender los cambios físicos y fisiológicos que suceden en el cuerpo. Además es indispensable aprender las destrezas necesarias para usar el equipo y las técnicas adecuadas para bucear en aguas abiertas.
Un buen entrenamiento debe concluir con una salida en aguas abiertas. Estas inmersiones deben cubrir destrezas tales como: procedimientos de emergencia, navegación, suministro de aire, manejo de equipo, control de flotabilidad, ascensos y suficiente tiempo para completar las prácticas.
Si al placer del deporte se le suma el gratísimo escenario de practicarlo en un lugar de ensueño, ¿que más podemos pedir?
En el mundo son numerosos los lugares indicados para este deporte. El Mar Rojo y las barreras de coral de Australia son dos sitios de gran belleza marina. Los lugares más cercanos a nuestro país y más acordes al presupuesto, son Costa Rica; el archipiélago Los Roques, en Venezuela; Aruba y Orengo, en Río Negro.

Paraísos mar adentro
Costa Rica cuenta con arrecifes de coral e islas paradisíacas mar adentro. Bajo las aguas se puede disfrutar de una variada vida marítima diversa y hermosa que incluye mantas, rayas gigantes, tortugas de mar, el colorido pez ángel, las formaciones de coral entrelazadas, las psicodélicas babosas de mar, hilos venenosos de mar, los delicados ventiladores de mar, delfines y en raras ocasiones, las ballenas.
A lo largo de la costa del país existe suficiente vida marina como para complacer a los más experimentados buzos. Además Costa Rica ofrece una excelente oportunidad para aprender a bucear, ya que la mayoría de los centros especializados ofrecen cursos certificados a muy buen precio, que se pueden completar en una semana aproximadamente.
La costa sobre el Pacífico tiene el mejor buceo del país, con menos corales, pero repleto de grandes peces. El buceo más popular se realiza en las áreas del noroeste, donde hay centros de buceo en playa del Coco, Ocotal y playa Hermosa, donde se ofrecen viajes a distintos lugares de bahía Culebra, y en isla Murciélago. Allí se pueden ver tiburones y mantas rayas.
El centro de buceo en Flamingo usualmente lleva gente a la isla Catalina, como a unos 7 kilómetros mar adentro. Este es otro punto excelente para ver tiburones y grandes peces.
También hay buenas condiciones de buceo superficial en el Refugio Nacional de Vida Silvestre Curú y cerca de los complejos turísticos de Tambor y Monteczuma, así como en las playas del Parque Nacional Manuel Antonio y cerca de los puntos e islas entre Dominical y el Parque Nacional Marino Ballena. Pero todos coinciden en asegurar que el mejor buceo de la costa del Pacífico se puede realizar en algunos de los arrecifes submarinos cerca de la isla del Caño.
El archipiélago de los Roques es un atolón en formación situado en el Mar Caribe, en Venezuela. Ocupa un área de 1.000 kilómetros cuadrados, formado por 50 cayos y 250 bancos de arena. Presenta la forma de un anillo con una laguna central y se encuentra ubicado al norte de la costa del país y a unos 170 kilómetros aproximadamente.
En el Gran Roque se aprecia una situación curiosa: es un lugar habitado, que por su condición de parque nacional no debería estarlo. Para hacer submarinismo en Los Roques se debe acudir a los centros especializados y sólo se puede hacer en grupos no mayores de 10 personas, acompañados por un buzo guía.
Esto se debe a que Los Roques es el Reservorio Marino más grande y antiguo del Caribe con varios tipos de fondos, y por las regulaciones del parque, no pueden haber más de esa cantidad de buzos en un mismo sitio, garantizando de esa manera que el servicio sea siempre personalizado.
En el cayo de Francisquí se ha formado una piscina de coral que permite apreciar la variedad de formas y gran colorido de la fauna marina, desde la misma orilla de la playa.
Una gran laguna de aguas tranquilas semejando a una auténtica piscina natural gigante hace las delicias de los buzos. En el fondo mora el inofensivo tiburón gata y muchas especies marinas, corales, peces y moluscos.
Los mejores lugares de buceo son la Piedra de La Guasa (30/35 metros), Boca de Cote (con espectaculares muros submarinos casi verticales que llegan a medir hasta 60 metros y variados corales y especies submarinas) y Cayo Sal (con muros verticales y cuevas adornadas de multicolores esponjas y formaciones de coral negro).

Buceo de naufragio
Aruba está catalogada como el segundo mejor destino del mundo para la práctica de buceo de naufragios, debido a que cerca de las costas existen una gran cantidad de barcos y aviones hundidos que hacen las delicias de los buzos.
Entre los más famosos está el tristemente célebre California, barco que recibió el pedido de auxilio del Titanic (que no contestó) y que después por esas cosas del destino terminó también hundido frente a las costas de Aruba.
Para quienes prefieren practicarlo en el país existen interesantes propuestas. Argentina cuenta con excelentes lugares y uno de ellos es Orengo, ubicada a 70 kilómetros de Las Grutas, en el golfo San Matías. A sólo 15 kilómetros al sur de San Antonio Oeste, los buceadores podrán explorar 15 metros de profundidad con muy buena visibilidad, y una temperatura acuática que va de los 12 a los 17 grados. Diversas especies marina dan vida a este lugar, donde habitan cangrejos, meros, sargos y pólipos.
Por eso, si de buceo se trata, y el deseo es completarlo con unas excelentes vacaciones, nada mejor que un buen asesoramiento.



Restos de barcos o aviones, tesoros debajo del océano.
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