Año CXXXV
 Nº 49.344
Rosario,
sábado  29 de
diciembre de 2001
Min 22º
Máx 35º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





Nuevo plan. El gobierno podría dar marcha atrás con la tercera moneda
El Argentino causó la primera renuncia
Espósito, presidente del Banco Nación, quería emitir 15 mil millones. Duró apenas 48 horas en el cargo

La vorágine actual se comió al presidente del Banco Nación, David Espósito, quien duró sólo 48 horas en el cargo. El detonante fue la declaración del economista mediático devenido en funcionario en la cual aseguraba que se emitirían 15 mil millones de argentinos, la tercera moneda que está preparando el gobierno. Sin embargo, esta unidad monetaria entró en un cono de incertidumbre ya que varios encumbrados dirigentes y economistas peronistas le plantearon al presidente sus dudas respecto a esta alternativa. No obstante, el presidente Adolfo Rodríguez Saá afirmó ayer su intención de emitir el argentino. En tanto, ayer se discutió en la reunión de gabinete el proyecto de ley de presupuesto 2002, que se dará a conocer la semana que viene y que contempla un recorte del 40 por ciento de los cargos políticos en los ministerios. Tras ese encuentro, Rodríguez Saá le pidió la renuncia a Espósito.
El pedido de renuncia a Espósito, a sólo 48 horas de tomarle juramento, fue uno de los hechos destacados de la jornada, y estuvo precedido por la polémica que el efímero funcionario generó con sus declaraciones sobre la posible emisión de 15.000 millones de argentinos.
"La situación no nos permite ningún tipo de error, somos rigurosos para adentro y para afuera", señaló el secretario General de la Presidencia a cargo de la Jefatura de Gabinete, Luis Lusquiños.
Ayer por la mañana, Espósito trató de poner paños fríos diciendo que la responsabilidad de determinar la cantidad a emitir del argentino es del Poder Legislativo. "La cuenta que hice es que deberían emitirse 1.250 millones de argentinos por mes, es decir 15.000 millones al año, pero debe considerarse la cuestión como una opinión intelectual que no la hice ayer, sino hace dos meses cuando escribí un paper sobre este tema", explicó el funcionario, ya demasiado tarde.
Economistas y políticos del PJ cuestionaron la breve y ahora malograda gestión de Espósito. Ayer por la mañana, el senador bonaerense Eduardo Duhalde había calificado los dichos de Espósito como "un disparate", y declaró que "si yo fuera Rodríguez Saá ese señor no estaba un segundo más en el puesto".
Minutos después, fue el gobernador de Buenos Aires, Carlos Ruckauf, quien, sin nombralo, sostuvo que "las decisiones en materia económica y financiera las toma el presidente" y que "los funcionarios de menor rango deben dedicarse a trabajar y no a hacer declaraciones que confunden a la gente".
Si bien no hubo información oficial en torno a quién será designado al frente del Nación, el nombre que sonó más fuerte fue el del Pablo Rojo, ex presidente del Banco Hipotecario durante la gestión menemista y que actualmente está a cargo del Dresdner Bank.

El Argentino
El futuro del Argentino está en una nebulosa. Después de ser anunciado con bombos y platillos como el aceite para lubricar la economía argentina, las cifras de posible emisión asustaron a más de uno, incluso a encumbrados dirigentes del justicialismo. El temor es que una emisión desmedida triture su cotización respecto al dólar y el peso, haciendo que en poco tiempo se convierta en papel pintado.
En ese sentido, el senador peronista por Corrientes Jorge Capitanich ayer por la tarde puso en duda la creación la tercera moneda, al asegurar que habrá que estudiar convenientemente el tema y porque "todavía hay muchos interrogantes".
El legislador sostuvo que el presidente provisional del Senado, Ramón Puerta, le confió que hasta el propio Rodríguez Saá tendría "sus reservas de seguir impulsando esta tercera moneda". El senador señaló que "como legisladores debemos propiciar medidas con una dosis de racionalidad". En ese sentido, Rodríguez Saá sostendría que a esta nueva moneda hay que analizarla detenidamente y que una de las alternativas era emitir Lecop hasta tanto se pueda financiar el programa de subsidio para jefas o jefes de hogar desocupado y que le parecía razonable que se debatiera adecuadamente el presupuesto 2002 para que el mismo no represente una estructura deficitaria que no sea financiable.
Sin embargo, más tarde el presidente le expresó a directivos de medios de comunicación su intención de emitir el argentino.

El presupuesto 2002
Rodríguez Saá ayer ordenó incluir en el proyecto de ley de presupuesto 2002 un nuevo recorte del 40 por ciento en los cargos políticos de todos los ministerios de la administración pública.
El ministro de Trabajo, Oraldo Britos, dijo que el gabinete nacional está trabajando a full para terminar de revisar los números del presupuesto que había elaborado el anterior gobierno y anunció que el nuevo proyecto estará terminado "entre el domingo y el lunes" próximos.



David Espósito sufrió la embestida del PJ.
Ampliar Foto
Diario La Capital todos los derechos reservados