El entrenador uruguayo Oscar Washington Tabárez aseguró ayer que le despierta "mucha incertidumbre" la situación económica que se vive en la Argentina y explicó que sólo por tratarse de Boca aceptó "volver a trabajar" en el país.
Señaló asimismo que "si bien fue corto el tiempo para llegar a un acuerdo con Mauricio Macri, habría sido todo más fácil de no ser por esta situación, que desde afuera se ve con una mirada de mucha preocupación, más que la impresión que tiene la gente que vive en la Argentina", agregó.
Ya en el plano futbolístico, se mostró escéptico de poder contar en 2002 con un centrodelantero goleador y aseguró que "los número nueve que hacen goles son materia escasa y por eso son tan valiosos".
"Todo el mundo anda buscando un jugador así, pero hallar un nueve goleador es tan difícil como querer encontrar oro en medio de la ciudad. No son muchos los que hay en el mundo", señaló Tabárez, quien inicialmente dio el visto bueno al retorno del santiagueño Alfredo Moreno, quien vuelve al club después de una temporada en el Necaxa mexicano.
"Por supuesto estoy al tanto del presente de Moreno, está en la nómina de los jugadores con que cuento. En principio lo recuerdo por haber estado en aquella racha goleadora y sé que es buena su actualidad", añadió.
"Si uno tiene alguien de esas características, sería tonto no empezar con él", explicó en declaraciones a "De una con Niembro", que emite la Radio La Red.
Insistió en que el presidente de Boca, Mauricio Macri, no le informó de la inminencia de un alejamiento del armador Juan Román Riquelme y que "por lo que sé, tiene contrato hasta el año 2003, aunque no sé exactamente hasta qué mes".
"También sé que está jugando por una cláusula que hay en la Argentina, del 20 por ciento, que no llegó a un acuerdo en la renovación del contrato y que luego quedará libre, que la transferencia al exterior podría hacerse si Boca la considera factible y si al jugador le conviene", añadió.
Tabárez anunció que se pondrá por primera vez en contacto con el plantel el próximo 11 de enero en Casa Amarilla y que ese mismo día "viajaremos a Tandil para iniciar los trabajos de pretemporada".
Ante una consulta puntual respondió que no conocía previamente a Macri y que le pareció "una persona muy definida, de convicciones, muy concreta, con la que no hablamos de nada superfluo" y evaluó la gestión del dirigente comparando "lo que conocí de Casa Amarilla en 1993, cuando apenas se estaban haciendo los fraccionamientos y lo que veo ahora". (DyN)
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