Piden que la Magistratura trabaje "ad honórem"

La senadora justicialista por San Luis, Liliana Negre de Alonso, legisladora de extrema confianza del presidente Adolfo Rodríguez Saá, presentó ayer un proyecto de ley en el cual se propone que los miembros del Consejo de la Magistratura trabajen ad honórem.
Como compensación, en su iniciativa la legisladora deja abierta la posibilidad a que los abogados que forman parte del cuerpo puedan ejercer la función pública y su profesión simultáneamente, por el tiempo que dure su mandato.
En un comunicado de prensa se justifica la presentación a partir "del estallido social de la semana pasada, cuando austeridad y menos burocracia se convirtieron en imperativos que los legisladores nacionales tratan de incluir en sus propuestas para agilizar la política y hacerla menos costosa".
El Consejo de la Magistratura es un órgano creado a partir de la reforma constitucional de 1994, pero que recién se puso en funcionamiento hace tres años.
Está integrado por representantes del Senado, de la Cámara de Diputados, de la Corte Suprema de Justicia, del Poder Ejecutivo, de la Asociación de Magistrados, de los abogados de la matrícula y de ámbitos científicos y académicos.
En los fundamentos del proyecto se explicita que el presupuesto nacional le asigna al Consejo de la Magistratura un monto anual de 569.604.140 pesos, de los cuales se ejecutaron al 13 de diciembre 487.237.475 pesos.
De esos montos el 81,47 por ciento corresponde a gastos en personal, por lo cual se propone congelar los nombramientos.
El proyecto obligará a los integrantes del Consejo a tomar una decisión, en momentos en que toda la sociedad reclama gestos de austeridad de la dirigencia.