El gobierno provincial resolvió anoche prorrogar la moratoria impositiva hasta el 11 de enero próximo. Hasta esa fecha los contribuyentes podrán presentarse en las oficinas de la Administración Provincial de Impuestos (API) con el objeto de pedir la liquidación del 5 por ciento de sus deudas para pagar a manera de anticipo y así entrar a la moratoria. La sede de la API quedó ayer desbordada por la gran cantidad de gente que decidió regularizar sus deudas y clamó por una extensión del plazo de presentación. Antes habían abundado las quejas por fallas en la organización de la atención al público.
El tan esperado anuncio sobre la extensión en la fecha para iniciar los trámites para la moratoria llegó al final del día, después de que cientos de contribuyentes se apretujaron y pasaron largas horas al sol a la espera de un turno. Hasta se tuvo que hacer presente el defensor del Pueblo adjunto de la provincia, Ricardo Cicarelli, para gestionar esa prórroga. Ahora habrá tiempo hasta el segundo viernes del mes que viene.
Los impuestos incluidos en la moratoria son el inmobiliario urbano y rural, patente única sobre vehículos, ingresos brutos, contribución de mejoras, ley 5.110, sellos y otros tributos menores.
De acuerdo con las disposiciones de Hacienda provincial, los contribuyentes que se presenten en enero obtendrán descuentos del 10 por ciento si pagan al contado, mientras que en febrero la rebaja que se ofrece es del 5 por ciento para el mismo caso.
Las condiciones para ingresar a la moratoria están destinadas al pago de las deudas anteriores al 30 de septiembre pasado, estar al día con los vencimientos posteriores a esa fecha y pagar el anticipo al contado del 5 por ciento.
Los beneficios son que en la actualización las deudas anteriores a marzo del 91 tendrán quitas del 50 por ciento e intereses con el 0,5 por ciento mensual no acumulativo. Las posteriores a esa fecha tendrán una actualización con el mismo interés sobre el capital.
Se prevén planes de pago hasta 60 meses, hasta las seis cuotas no se cobrarán intereses y a partir de esa cantidad se cargarán con una tasa del 0,5 inmobiliario y patentes, y de 50 pesos para el resto de los tributos.
En caso de incumplimiento, los planes caducarán al tercer incumplimiento consecutivo o alternado.
Jornada interminable
La pregunta que sobresalió ayer en la calle y en los pasillos del edificio provincial fue: "¿Hay prórroga?". La gente estaba sumamente interesada por saberlo, más aún teniendo en cuenta que muchos contribuyentes debieron soportar verdaderas amansadoras para poder cumplir con la adhesión al plan de regularización de morosos. Finalmente, la prórroga salió avanzada la noche.
El público colmó el edificio de la API y ayer a las 17.40 todavía había unas 200 personas en el lugar. Hubo protestas que apuntaron hacia los empleados. Y también se la agarraron con las autoridades, en alusión a la desorganización generada a la hora de ordenar las colas que se multiplicaban y confluían, muchas veces, en el mismo lugar.
Mientras el calor impiadoso se hacía sentir con fuerza, la gente (entre ella ancianos) trataba de taparse de los rayos del sol colocando carpetas y papeles sobre su cabeza y buscando cualquier resquicio de sombra.
Esta es la misma situación que se plantea en las oficinas del Api cada vez que está a punto de vencer una moratoria.
Hoy ya cambiará el cuadro, habrá más tiempo para hacer los trámites.
La Ciudad
