-¿Qué balance hacés de la temporada 2001 de la música ciudadana? -El balance fue netamente positivo, a nosotros nos fue bien desde el punto de vista artístico porque tuvimos experiencias nuevas. En marzo estuvimos en el Festival Internacional del Tango, en Granada, por segundo año consecutivo. Además hicimos una gira por Málaga, Alcalá la Real, Fuengirola y Madrid donde presentamos un extracto de "Estampas de Tango", el show que presentamos en El Círculo. -¿LLevaron algo más que sus voces? -Exacto. Un 80 por ciento fueron interpretaciones nuestras pero también le dimos mucha importancia a las partes instrumentales del trío que nos acompañó, integrado por Octavio Brunetti, en piano; Domingo Porta, en bajo y nuestro arreglador y director, Héctor Grimolizzi, en bandoneón. También fue una pareja de baile formada por María Laura Capitani y Gabriel Sensich. -¿De las actuaciones del año cuáles fueron las más impactantes? -Una, sin dudas, fue la del estadio de Rosario Central donde participamos como grupos soporte de Soledad en un espectáculo destinado a la Cruzada del Espíritu Santo del Padre Ignacio. Fue algo muy lindo porque había como 20 mil personas y era una experiencia inédita en Rosario para nosotros. En mayo hicimos el mega recital que proponemos todos los años pero nos encontramos con la sorpresa de que debimos agregar otra función. Fueron dos noches con el Auditorio Fundación Astengo lleno. -¿Por qué creen que los eligieron para cantar la canción de las cumbres mundiales del tango? -"Viva el tango", un tema que habíamos grabado en un disco nuestro, fue elegido para abrir el Festival del Tango de Granada en el 2000. Estaba presente Horacio Ferrer, el autor de la letra, y nosotros lo cantamos a capella. Eso impactó muy bien a Tato Rébora, el organizador, que es un tipo federalista con raíces en Córdoba y nos convocó. Quizá sea porque hacemos el tango a dúo y por nuestro estilo que nos llamó. La repercusión que tuvimos nos abrió muchas puertas. Este año nos contrataron y nos fuimos con todo a Europa. -¿Por qué se distinguen Los Amadeo? -Apuntamos a un público nuevo. Por eso nos permitimos incorporar saxos, flauta traversa y percusión en la interpretación de tangos que hablan de la actualidad, que son escritos por autores como Horacio Ferrer o Héctor Negro, que hablan de los que nos pasa hoy. No nos consideramos tipos biológicamente antiguos. Esto posibilita un sonido joven para el oído de la gente. -¿Por que eligieron al tango como género de expresión? -Venimos de una familia que siempre defendió la música argentina. Las comidas de los domingos en familia terminaban con canciones del tango y del folclore. Empezamos a cantar tangos y el desaparecido Walter Verón nos vio en el 901 y observó lo que nosotros no habíamos advertido: "Ustedes son hermanos, tienen un timbre de voz diferente. Los convoco a que vengan a Mar del Plata". Y nos llevó al show "Trasnochando tango". Lo que vivimos en esa temporada fue impagable. El Polaco nos decía: "Chicos, el tango no trasciende". Lo que quería decir es que si no llegaba un aire nuevo el tango se moría. Por eso apostamos a la apertura y a proponer cosas nuevas.
| |