La operadora mayorista de viajes Travelclub, una de las más grandes e importantes del sector, dejó de operar ayer y se presentó en concurso preventivo de acreedores. La compañía de Carlos Adjemiantz, con sede central en Uruguay 367 de la Capital Federal, comercializaba destinos de todo el mundo, especialmente el Caribe, Brasil y México, a través de sus oficinas de Rosario (en el entrepiso de la galería La Favorita), Buenos Aires, Córdoba, Mar del Plata, La Plata y Mendoza.
Según indicaron fuentes de la empresa, la mayoría de los empleados que trabajan en Travelclub fue notificada de la decisión el sábado último a través de telegramas de despido. Durante la mañana de ayer en Buenos Aires, los empleados encontraron un cartel en la puerta de Travelclub que informaba: "En el día de la fecha, Travelclub SA se presentó en concurso preventivo de acreedores. Oportunamente se informará el juzgado que llevará la causa. Para mayor información comunicarse a infotravelclub.com.ar", mientras que en Rosario sólo no se abrieron las puertas sin indicar nada sobre los motivos.
Hasta el viernes pasado la empresa aceptaba reservas y anteayer publicó sus ofertas y destinos como lo hacía todos los domingos en los principales matutinos.
Se estima que en estos momentos se encuentran unos mil pasajeros en el exterior que habían contratado los servicios de Travelclub y una cifra similar ya tenía reservas para este verano. Con este cierre, ya suman ocho las agencias mayoristas o minoristas que este año se vieron obligadas a cerrar por la drástica caída en las reservas y ventas, producto de la recesión económica del país y de los atentados en los EEUU.
Un sector castigado
"Primero fue lo de las Torres Gemelas, después las medidas de Cavallo y ahora esto", se lamentó la operadora de una agencia de viajes de Rosario, convencida de que la crisis de Travelclub iba a generar desconfianza en la gente, que sumada al miedo y las dificultades económicas terminarían en un cóctel explosivo.
En tanto, ayer otro operador ya había tenido que socorrer a pasajeros que se quedaron en banda en Brasil, tras la confirmación de que no tenían paga la habitación del hotel donde iban a parar y el monto que se les exigía era muy alto. "Hubo que salir a resolver el problema de Travel vendiendo nuevos servicios a pasajeros en el exterior", indicó. Desde otra empresa mayorista confirmaron y ampliaron la gravedad del problema: "Nos hemos enterado de casos en que los clientes se han tenido que hacer cargo de la parte hotelera porque no les permitían la salida".
Sobre cómo afectará al sector, Viviana Corbelli de Transatlántica, explicó que como las agencias son intermediarias cualquier acción de los clientes se trasladará al mayorista, y admitió que "se trata de un problema serio como cada vez que alguien tiene este tipo de inconvenientes", aunque aclaró que en particular su empresa no tenía en este momento viajes contratados con Travelclub.
En líneas generales, los comentarios son que Travelclub tenía una diferencia notable en los precios respecto de otros prestadores, lo cual, para algunos, era un motivo para desconfiar.
"Lo importante -sostuvo Corbelli- es que el público aprenda a confiar en su agente de viajes porque es el que da la cara. Muchas veces la gente viene queriendo comprar una oferta puntual que se publicó en el diario, pero si nosotros no tenemos la certeza de la calidad del servicio, no lo ofrecemos. El agente de viajes sabe qué producto es recomendable y cuál no".
Otro agente explicó que en este momento el problema más importante es saber qué pasa con los pasajeros que están en destino, ya que no se sabe si Travelclub pagó los servicios. En tanto, la Dirección Nacional de Turismo envió una circular a las minoristas en donde explicó que ayer se constató que las oficinas de Travelclub en la ciudad de Buenos Aires (un edificio de varios pisos) permanecieron cerradas por la que pedía que las agencias que tuvieran contratados servicios con la mayorista hagan las denuncias correspondientes para poder remitirlas al órgano de control nacional.
La Ciudad
