Rodolfo Ingaramo dio un paso al costado y dejó la dirección técnica de Tiro Federal. Tal como lo había anticipado en su diálogo con Ovacion tras la derrota ante Ñuñorco, en Tucumán, el entrenador presentó ayer su renuncia indeclinable porque "no le pude encontrar la vuelta al equipo en estas seis fechas y considero que en este momento el club está a tiempo de revertir la situación con la llegada de otro conductor". Y para conocer al reemplazante habrá que esperar porque "esto es reciente y nos sorprendió. No tenemos ningún nombre en carpeta", explicó el máximo dirigente tirolense Carlos Dávola.
"Un técnico se da cuenta cuando el equipo no responde a lo que uno pretende del juego. En estas fechas realicé muchas variantes en cada partido y los resultados tampoco aparecieron. Y el fútbol es así, sin resultados no se puede llegar a nada y prefiero dar un paso al costado ahora para que los dirigentes consigan a otro técnico que pueda encontrar las respuestas necesarias para que los resultados sean favorables", agregó Fito en diálogo con Ovacion.
El entrenador había anticipado su posible desvinculación y ayer la hizo efectiva. "Se lo comenté a los muchachos del plantel el domingo a la noche y cuando hoy llegamos a Rosario lo charlé con Carlos Dávola y le expliqué bien los motivos", agregó Ingaramo.
"Realmente me sorprendió la renuncia. Porque si bien perdimos en Tucumán no era como para que deje de conducir al equipo. Ahora debemos pensar en encontrar un reemplazante y lo tenemos que hacer sin apresurarnos para conseguir un técnico con experiencia y de la misma calidad humana que Ingaramo", expresó el dirigente tirolense.
Y el técnico saliente amplió sus fundamentos para presentar la renuncia indeclinable al decir que "tuve la posibilidad de elegir los jugadores y trabajar con comodidad pero sin resultados no se puede seguir adelante. Lo siento porque estaba muy bien en Tiro, por su gente, porque los dirigentes siempre cumplieron y no tengo nada para reprochar".
De esta manera, la dirigencia tirolense se abocará entre hoy y mañana a buscar el reemplazante de Fito para que conduzca al equipo en el último partido del año ante 9 de Julio de Rafaela, que se jugará en el estadio de barrio Ludueña.
Tras ese encuentro habrá un receso de 21 días en los que el nuevo entrenador podrá trabajar para que Tiro se recupere en las posiciones y pueda pelear en los primeros puestos.
"Plantel hay como para pelear arriba y la llegada de otro técnico puede cambiar la racha. Así pasó cuando yo agarré al equipo en las últimas cinco fechas del torneo pasado y casi clasificamos. Ahora hay más tiempo para que el nuevo entrenador pueda trabajar y lograr el objetivo que todos nos habíamos propuesto. El de llevar a Tiro a los primeros puestos", concluyó Ingaramo.
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La Ciudad
