Daniel Passarella está más que preocupado. Ayer, Parma sumó su cuarta caída consecutiva y el equipo está relegado a la antepenúltima posición en la tabla. Los hinchas y la dirigencia del conjunto parmesano empiezan a evidenciar signos de desconfianza. A la hora de anteponer excusas, el Kaiser no se quedó atrás: declaró que ante Roma su equipo perdió por dos jugadas clave. "El partido estaba jugándose de forma tranquila y se complicó por un episodio (sic), cuando el árbitro sancionó una falta inexistente, que era un tiro libre justo para un jugador experimentado como (Marcos) Assuncao, que nos empató", dijo Passarella. Respecto al segundo tanto, que determinó la derrota por 2-1 en el Ennio Tardini y que marcó Diego Fuser, Passarella subrayó: "Ese es otro episodio, ya que Fuser remató una pelota desviada por nuestra defensa y que descolocó al arquero; nadie tuvo la culpa". Mientras Daniel busca explicaciones, el descenso acecha a Parma
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