Ya llega a 55% el avance en la recolección de la superficie sembrada con trigo dentro de nuestra área de influencia. La situación se sigue manteniendo con la mismas características de diferentes grados de afectación por fusarium, determinando así la imposibilidad de establecer un rango medio de rendimientos, con grandes diferencias entre mínimos y máximos, pero seguramente bastante inferiores a los potenciales.
Trigo
La situación que afecta al cereal no sólo trae desmejoras en la calidad con lotes de rechazo y la mayoría rayando la tolerancia, sino que también profundiza junto con las enfermedades de hojas las disminuciones en los rendimientos. Las diferencias entre parcelas tratadas con fungicidas y no tratadas promedian los 700 kg/ha a favor de las primeras. Por esto y por ahora, los promedios de producción en el área central del país se encuentran entre los 2.200 y 2.300 kg/ha (lejos de lo que hablábamos hace dos meses). A nivel país, la esperanza de lograr buenos niveles productivos se mantiene en las regiones del centro, sur y sudeste de la provincia de Buenos Aires y La Pampa cuyos lotes de trigo presentan muy buen aspecto y potencialmente con posibilidades de llegar al final del ciclo sin sorpresas. Esta región involucra unas 3,5 millones de hectáreas de trigo, nada más que el 50% del área total de Argentina. Ante el incierto y flojo panorama de los rendimientos generales de la región centro-norte del país, las mejores proyecciones confirman un volumen final de cosecha de 17 millones de toneladas pero no todos los analistas comparten esto y probablemente el resultado sea aún menor. Desde el punto de vista comercial y ante este panorama de baja calidad de la mercadería, seguramente irá en aumento la demanda de lotes que puedan mejorar la aptitud panadera (de hecho tanto los molinos como los exportadores lo están haciendo). Por esto es recomendable que aquellos que logren un producto de calidad instrumenten todos los medios para diferenciarlo en su comercialización, pues seguramente esto se verá reflejado en un mejor valor.
Maíz
Es importante el desarrollo que están adquiriendo los lotes de maíz en el área central del país. El adecuado índice de área foliar les permite captar plenamente la radiación del sol. Por ahora, la demanda de agua de los cultivos está siendo satisfecha en virtud de que la humedad subsuperficial disponible (40% - 60% del agua útil) es importante para lotes sembrados a mediados de setiembre, hoy muy próximos a la floración. Hacia el oeste del área Rosario, el contenido de agua en el suelo va disminuyendo hacia el centro y el norte de Córdoba, lugares donde seguramente será necesario la ocurrencia de precipitaciones en los próximos 10 días para que se mantengan las muy buenas posibilidades de rendimientos ya proyectadas, puesto que el paquete tecnológico utilizado en el gran cultivo apunta en la generalidad de los casos a lograr lo antedicho. La casi segura retirada de Brasil como exportador de maíz y la menor producción argentina en la presente campaña, a lo que le sumamos que la incorporación de China a la OMC podría dar lugar a fuertes operaciones (ya han realizado importantes compras en EEUU) son elementos "fundamentales" que hacen suponer que para la época que ingrese la cosecha Argentina podríamos tener mejores condiciones de precios que las actuales.
Soja
Sin limitaciones de humedad continúa la normal evolución del cultivo en todos sus estadíos en lo que respecta a soja de primera siembra. Lo que sí se nota es un menor desarrollo en parcelas correspondientes a siembras de octubre, seguramente debido a la sucesión de jornadas con menores temperaturas que ocurrieron durante esta primera etapa del cultivo.
El avance en la siembra de lotes de segunda acompaña a la recolección del trigo, ya que el contenido de agua de la parte superficial del suelo todavía es suficiente como para permitir que esta tarea continúe. Al igual que el año anterior, en la región de influencia de Rosario, por lo menos el 70% del área destinada a soja sobre trigo podrá ser sembrada antes del 15 de diciembre y esto significa que por fecha de implantación las posibilidades de lograr buenos rendimientos están intactas.
Víctor Capuccino
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