Roldán.- Los empleados municipales realizaron ayer una manifestación frente a la sede comunal ante un importante número de efectivos policiales. El repentino abandono de la conducción del Ejecutivo, antes de iniciarse la protesta, sorprendió a los trabajadores que vieron como el intendente Roberto Di Santo y su gabinete dejaban la municipalidad en forma apresurada.
El Sindicato de Trabajadores Municipales (Sitram) había convenido con el mandatario que se repartiría entre los trabajadores el dinero recaudado en la semana, según lo acordado previamente en la Secretaría de Trabajo hace unos días. El Sitram decidió incrementar ayer las medidas de fuerza por el incumplimiento del acta firmada en la Secretaría de Trabajo entre la Subsecretaría de Municipios, el intendente y el gremio. En el mismo se dejó establecido que se realizarían gestiones en la provincia para destrabar una partida destinada a saldar parte de la deuda.
El secretario del gremio ,Miguel Simonutti, opinó que el único responsable es el intendente: "Luego de 10 años de gobierno se va por la ventana dejando una deuda impresionante y muchas familias que no tienen nada para llevarle a sus hijos".
De acuerdo al secretario gremial "la deuda con los trabajadores es de 220 mil pesos, más 700 mil a proveedores, según dijo Di Santo; casi un millón de dólares de compromisos cercanos. Sabemos que la Nación va a girar fondos a la provincia después del 10 de diciembre pero la distribución a las comunas llevará tiempo y para nosotros cada día que pasa es más desesperante y angustioso", disparó.
La Municipalidad debe los salarios de octubre y noviembre, parte de septiembre y del aguinaldo. El conflicto se inició el 8 de noviembre y desde entonces sólo han cobrado un vale de 50 pesos.
Villenses en pie de lucha
Unos 400 agentes municipales se concentraron ayer frente al Palacio Municipal para reclamar el inmediato cobro de sus salarios, de los cuales hasta ahora sólo recibieron una parte. El intendente Horacio Vaquié y su secretario de Hacienda, Daniel Estibiarría, hablaron con los empleados y prometieron cancelar la deuda salarial la semana próxima, aunque advirtieron que ello será imposible si no ingresa dinero al municipio.
"Si no entra dinero no podemos pagar", reconoció Estibiarría, al tiempo que explicó que en los últimos tres meses la municipalidad dejó de percibir unos 150 mil pesos por coparticipación y una cifra similar en concepto de Derecho de Registro e Inspección (Drei), situación ésta provocada por la abrupta caída en las ventas sufrida por los comercios locales y, especialmente, por su principal contribuyente, la siderúrgica Acíndar.
Estibiarría prometió que recién la semana próxima el municipio podría estar en condiciones de abonar el 45 por ciento que aún adeuda a sus 500 agentes, aunque advirtió: " siempre que podamos contar con la coparticipación".
En Melincué también
Por su parte, el Sindicato de Trabajadores Municipales de Melincué difundió un comunicado sobre la medida que realizan los agentes comunales ante la falta de pago de los salarios del mes de octubre, a pesar de que la comuna fue intimada a solucionar el conflicto. La modalidad del paro que se inició el 21 de noviembre pasado, es con concurrencia a los lugares de trabajo en ambos turnos, hasta que se haga efectivo el pago de sus haberes.
Según el comunicado gremial, "la medida es consecuencia de la insensibilidad de las autoridades de la comuna ante el reclamo de los trabajadores".