Carolina Taffoni
Celeste Carballo se presenta hoy, a las 22, en la Rockería, Wheelwright 1745, para mostrar en vivo su nuevo álbum, "Celesteacústica", en el cual repasa algunos de sus clásicos en versión desenchufada. La cantante tocará acompañada por un baterista y un contrabajista.
"Celesteacústica" se grabó con músicos invitados como Charly García y los Ratones Paranoicos. En este álbum Celeste Carballo se abre paso entre el blues y el rock para incursionar en la música ciudadana, con "Un tango desnuda", y en el folclore, con la zamba "Algo nuevo".
En charla con Escenario la cantante explicó cómo se acercó al tango y a la zamba, aseguró que no le preocupa la competencia entre hombres y mujeres y dijo que todavía no perdió la capacidad de asombro.
-¿Por qué decidiste grabar un disco acústico?
-Venía con esa intención desde "Tercer infinito", el álbum anterior, y en este disco lo pude cerrar. Quería grabar todas guitarras acústicas, tambores, bandoneones y cuerdas.
-¿Cómo se dio la participación de los invitados?
-Yo estuve tocado en algunos shows de los Ratones Paranoicos, me sentaba a tocar la batería. Y ellos me devolvieron el favor. Otro invitado fue Pablo Guerra, el violero de los Caballeros de la Quema. Con todos ellos armamos un set de guitarras acústicas para hacer una versión de "Sabemos que vuelvo pronto", un hit de "Celeste y la generación". Con Charly García grabamos "Buscábamos vida", otro tema de ese disco, que él produjo. Fue un momento mágico, estuvimos grabando toda la noche. Yo toqué la batería y Charly los demás instrumentos. Después se metieron las cuerdas de Alejandro Terán, que le dieron una calidez especial al disco.
-¿Cómo fue que incursionaste en el tango?
-Yo vengo escribiendo textos para tangos desde el año pasado, cuando empecé a cantar como invitada en los shows de Daniel Melingo. Ahí descubrí que no está todo dicho en el tango, como aseguran algunos. También me encontré con el maestro José Colangelo, y él musicalizó uno de mis textos. Además yo me puse a trabajar en la música de algunas de las letras. El plan es sacar un disco de tangos, pero es un trabajo sin plazos, porque no quiero presionarme cuando se trata de la creatividad.
-¿Cómo te acercaste a la zamba?
-En los últimos cinco años estuve mucho de gira por el norte del país, y en todos los lugares nos invitaban a un asado y aparecían los guitarreros con las zambas. También estuve cantando como invitada en los shows de Liliana Herrero, y así se me contagiaron las zambas. Se me coló un sentimiento por ese género, que es la música que yo cantaba en la escuela, cuando tenía 9 ó 10 años. Por eso escribí la zamba "Algo nuevo", que cierra el disco "Celesteacústica".
-¿Qué sentís cuando te dicen que sos una de las pioneras del rock nacional?
-Que lo sigo siendo, cada día, cada segundo. Este país es así, venís remando y seguirás remando hasta el día que te mueras. Igual yo me siento muy reconocida por mis colegas, tal vez demasiado, me gustaría pasar todavía más inadvertida.
-En EEUU algunas mujeres lideran los rankings y convocan más que los hombres, ¿por qué eso no pasa en la Argentina?
-Acá vivimos en una sociedad sexista, y así se pierde la esencia que es el ser humano. Yo creo que las mujeres hoy por hoy están bien ubicadas en el mundo de la música: cada vez hay más cantantes, instrumentistas, productoras, periodistas, directoras de video, fotógrafas. Pienso que estamos a full.
-Pero no a la par de los hombres...
-Yo no establecería ese tipo de competencia, no me preocupa ese enfrentamiento. Lo mejor es que cada uno haga su camino.
-¿Cómo ves la escena del rock argentino?
-Veo con alegría que la gente se está empezando a preocupar por buscar la música que quiere escuchar, ya no compra todo lo que le venden desde los medios. Ese es el lugar que históricamente ocupó el rock nacional, y ahora lo está recuperando.
-¿Adquiriste nuevas influencias en los últimos años?
-Sí, pero no las puedo reconocer, porque a mí se me mezcla todo. ¿Cómo podés dividir en tu alma el bandoneón de Astor Piazzolla y la batería de Charlie Watts? Ultimamente estuve escuchando mucho a Piazzolla, mientras no me puedo desprender de los Stones, por dar un ejemplo.
-¿Qué diferencias hay entre la Celeste Carballo de hoy y la de "Me vuelvo cada día más loca"?
-Hay 20 años de aprendizaje a todo nivel y la misma capacidad de asombro. Todavía no perdí la capacidad de asombro, y esa es mi esencia.
-¿Cómo se ve el rock desde los 45 años?
-Ahora sé que acordes estoy tocando. Esa es la única diferencia. Antes no tenía ni idea, todo era pura intuición, pura rabia.
-¿Qué te queda pendiente?
-No tengo muchas ambiciones ni grandes planes. Yo vivo al día y lo único que quiero es seguir tocando.
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Carballo se animó a grabar un tango y una zamba. |  | Ampliar Foto |  | |
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La Ciudad
