"No recuerdo nada". Con esta frase, y sentado frente al juez Carlos Alberto Carbone, el médico Eduardo Fridman declaró ayer que no tiene registros en su memoria del momento en que apretó el gatillo de un revólver calibre 38 y asesinó de un certero disparo en la cabeza a Claudio Zampol, el gerente de la Asociación Española de Socorros Mutuos que le había comunicado una sanción ante la denuncia por maltratos que presentó una socia de la entidad. Sin embargo, el médico sí reconoció el arma y el bolso gris donde la tenía escondida cuando se encontró cara a cara con la víctima. "Esos elementos son míos", admitió, y así quedó registrado en su declaración indagatoria, la primera que presta luego de haberse negado dos veces a responder las preguntas del juez.
Para Fridman, el de ayer no fue un buen día. Además de estar más de una hora ante el juez Carbone, se enteró que ahora lo acusan de un delito mucho más grave: homicidio calificado por alevosía. Esto no sólo agrava su situación procesal sino que lo pone frente a una probable sanción más severa de lo que hubiera correspondido si sólo lo acusaban de homicidio simple. Esto es así porque para efectuar el mortal disparo el médico había extraído el arma de un bolso, lo que para el magistrado implica que la víctima no sabía lo que estaba por ocurrir y por lo tanto no tuvo la oportunidad de defenderse. De todos modos, el proceso recién comienza y por ahora el médico sólo está imputado.
En dos ocasiones anteriores, Fridman se había acogido a su derecho de mantenerse en silencio. Pero esta vez fue él, a través de su defensor, quien pidió declarar. Y a juzgar por lo que se decía ayer en los corrillos judiciales, el contenido de su declaración no sorprendió a nadie. "Dijo que no recuerda nada del instante en que disparó contra Zampol", fue la escueta información dada a La Capital por alguien que tuvo acceso a la declaración. Fridman estaba acompañado por su abogado, Luis Laporte, y aparentemente hizo un relato muy coherente que ahora será evaluado por el magistrado.
El crimen de Zampol se produjo el 19 de noviembre, a las 11.30, en la sede de la Asociación Española de Santa Fe y Entre Ríos. Fridman fue convocado a la oficina del gerente de la entidad para ser notificado de una sanción disciplinaria de 15 días originada en la denuncia que presentó Cecilia Monserrat, una socia de la institución que tuvo un altercado con Fridman y dijo haber sido víctima de una "reacción violenta y agresiva hacia su persona". Después de matar a Zampol ante la mirada atónita de asociados y empleados, Fridman dijo a viva voz en el hall de la institución: "Ahora se quedaron sin gerente" y salió del local. Caminó hasta un bar ubicado a media cuadra del lugar y se sentó a tomar una gaseosa. Allí lo detuvo la policía. El médico, de 73 años, se entregó sin resistirse.
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Fridman fue detenido tras matar a Claudio Zampol. |  | Ampliar Foto |  | |
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La Ciudad
