La CGT disidente conducida por Hugo Moyano convocó ayer a un "urgente plenario" para mañana, se declaró en "estado de alerta" y llamó a "todos los sectores" a "tomar la decisión de defender la tierra antes de que sea tarde", al criticar fuertemente las medidas económicas del gobierno para tratar de impedir la fuga de depósitos.
A través de un comunicado firmado por Moyano y Julio Piumato (secretario de prensa), se indicó que "el gobierno de De la Rúa, Cavallo y el FMI confiscó, virtualmente, los salarios y los depósitos de todos los argentinos, transformándolos en rehenes de la banca usuraria".
En ese contexto, anticipó que "los trabajadores no vamos a quedarnos cruzados de brazos frente a este robo y frente a esta virtual liquidación de la Nación".
"La CGT convoca a un urgente plenario para el próximo lunes (por mañana), se declara en estado de alerta y hace un llamamiento a todos los sectores gremiales, los empresarios del grupo productivo y de las pymes, a la Iglesia Católica y a los demás credos, a las organizaciones sociales, estudiantiles, juveniles y profesionales, a todas las organizaciones nacionales y populares, a todos los argentinos que amen a esta tierra, a tomar la decisión de defenderla, antes de que sea tarde", se afirmó.
Asimismo, consignó que "esta confiscación en favor de los bancos transforma la usura financiera en beneficiaria del esfuerzo de los argentinos, cuando precisamente ha sido esta verdadera dictadura financiera que viene asolando a la Argentina quien ha succionado la riqueza del país hasta llevarnos hasta esta desesperante situación".
La autodenominada CGT rebelde agregó que "la dolarización es la última etapa de la denigración nacional y el inicio de una etapa colonial para quienes defendemos la libertad, la democracia, el trabajo, la dignidad y la identidad nacional".
Mientras los rebeldes afilan los dientes, la CGT oficial apunta a otra estrategia. Rodolfo Daer, junto a los integrantes del Grupo Productivo, que integran la UIA y otros sectores empresarios, publica hoy una solicitada en varios diarios del país en la que denuncia un "ataque especulativo" detrás de la corrida bancaria.
El sindicalista se pronuncia por un gran acuerdo nacional, o una versión autóctona del Pacto de La Moncloa español, y rechaza cualquier posibilidad de devaluación o dolarización, así como todo otro ajuste sobre salarios y jubilaciones.
Sin concertación
En tanto, las dudas de las CGT sobre su asistencia a la mesa de concertación propuesta por el gobierno quedaron disipadas después de que la cuestión terminara de raíz: no hubo encuentro por el consenso.
Claro que el panorama, ahora, excede las desventuras sindicales, pues el país está atravesando una zona de turbulencias pocas veces vista.
Por estas horas los principales dirigentes de las centrales gremiales se están probando la ropa que piensan llevar a una reunión con quienes toman decisiones de peso que marcarán el futuro del país.
Es que, junto con los miembros del Grupo Productivo, las dos CGT estuvieron gestionando un encuentro con la misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) que visita el país y quieren concretar mañana la reunión.
Los dirigentes empresariales y obreros quieren que sea tenido en cuenta su punto de vista sobre la dura realidad argentina y también advertirles a sus interlocutores que se le permita un respiro al país para poder salir del pantano, adelantó uno de los posibles asistentes a esa reunión.
Por el lado sindical están anotados para concurrir los jefes de ambas centrales (Daer y Moyano), y varias de las principales espadas gremiales, como Armando Cavalieri, Carlos West Ocampo, Oscar Lescano y Andrés Rodríguez.