En un clima de sumo nerviosismo que no se vio ni las peores época de la soja, asumió ayer como nuevo presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario, Federico Boglione. Con el 59 por ciento de los votos de los asociados, el ex propietario de la aceitera Santa Clara y candidato de la lista Amarilla pasó a ocupar la presidencia de la entidad bursátil en reemplazo de Nicanor Sodiro.
Para los asociados de la Bolsa fue un hecho de suma trascendencia ya que desde hace 50 años que no se daba una interna entre dos listas. Las expectativas de los corredores están concentradas en la posición que adopte de ahora en más la entidad en temas ríspidos, como el impuesto a las transferencias financieras que afectan a los corredores de granos.
En la Bolsa de Comercio de Rosario se respiraba ayer un clima de mucha ansiedad ante las elecciones. Así, parecieron quedar a un costado las habitualles preocupaciones por los precios de la soja, el trigo o el maíz.
El movimiento entre los asociados fue intenso, el bar mejoraba sustancialmente su facturación, los celulares no dejaban de sonar y esta vez no era por las cotizaciones. Con más de dos horas retraso se dio a conocer el resultado del escrutinio que dio por ganadora a la lista amarilla liderada por Federico Boglione y con Oscar Rodríguez y Alfredo Calvo en las vicepresidencias 1º y 2º respectivamente. Completan la lista, Manuel Rodríguez Benitez, Tomas Alvarez, Miguel Rosental, Angel Larrosa y Ricardo Fernández (vocales titulares), Aníbal Ivacich y Máximo Bressan (vocales suplentes), Mario Casanova (síndico titular) y Ricardo Moscariello (síndico suplente).
En un total de 463 votantes, la lista Amarilla ganó con 273 votos contra los 188 de la celeste que encabezó Roberto Ferrari Gino, secundado por Luis Herrera y Angel Torti. Hubo sólo dos votos en blanco, por lo cual la diferencia para el candidato ganador fue de 88 votos.
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En su plataforma electoral, Boglione propuso: acrecentar el prestigio de la Bolsa, consolidar la transparencia de los mercados Físicos y a Término, mejorar el diálogo con los corredores de cereales, agentes de Bolsa, acopiadores, cooperativas y productores para incrementar la defensa de sus intereses sectoriales, continuar el trabajo a favor de la hidrovía como el mejor medio para bajar los costos de transporte de cargas, avanzar en la implementación del plan de accesos ferroviales para el transporte de cargas en el Gran Rosario (Circunvalar).
También planteó defender la libre competencia en los mercados para evitar los daños que puede generar la concentración económica, propiciar la conformación de una federación de bancos regionales con epicentro en Rosario para mejorar el apoyo crediticio a las empresas de la zona y auspiciar la firma digital como medio de agilizar la operatoria del mercado de granos bajo la responsabilidad de la Bolsa.
"Es un lindo desafío y toda la lista que me acompaña esta dispuesta a embarcarse en el mismo", señaló el flamante presidente en diálogo con La Capital .
"Estamos pensando en darle más energía a los mercados que funcionan en esta Bolsa ya sea el de cereales, el de valores y el término", explicó Boglione para que Rosario tenga la fuerza que tenía y que creía en esta institución", agregó.
Si bien en términos generales no se prevén cambios sustanciales en la política que lleva adelante la institución, en los pasillos los operadores comentaban las expectativas que existen para que la nueva conducción ahonde en respuestas para temas como la eliminación del impuesto al cheque que tanto preocupa al sector."La postura de la nueva conducción es apoyar totalmente a los corredores sobre todo con respecto al impuesto al cheque porque creemos que los impuestos distorsivos arruinan a los mercados", explicó Boglione.
El nuevo presidente de la entidad tiene una vasta trayectoria en la institución, así como una reconocida participación en el ámbito del comercio de granos y la actividad agrícola y productiva en general.
Boglione ya fue presidente de la Bolsa entre 1988 y 1989 y titular de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) entre 1984 y 1988. En lo que respecta a la actividad privada presidió la fábrica de Aceites Santa Clara.