| | cartas Esto sí que es progreso
| Soy pensionada y tengo 78 años de edad. En el año 1997 iba frecuentemente al banco. Frente a la ventanilla estaba un empleado. Previo saludo, yo entregaba mi documento, él buscaba un papel que yo firmaba y luego recibía un cheque que cobraba en la ventanilla contigua y me entregaban el recibo del mes. En 1999 se me comunica que para agilizar trámites y "beneficiar al cliente" me darían una tarjeta con la cual cobraría el día y la hora que deseara en un cajero automático y además bla, bla, bla. Por suerte aprendí pronto el mecanismo para recibir mi sueldo (que no es de privilegio). Al mes siguiente el cajero rechaza la tarjeta. Toda la mañana la pasé en el banco tramitando otra tarjeta hasta que, finalmente cobré por ventanilla. Una nueva tarjeta, un nuevo número personal. Dos meses más tarde, varios jubilados y/o pensionados, no lográbamos cobrar. Se nos dice que cambiáramos el número personal; nuevos trámites. Una señora recibió menos dinero de lo que había teclado. ¿Le creerían en ventanilla? En otra ocasión un jubilado recibió un billete de 50 pesos falso. Fue a quejarse, ¿creyeron? Ahora cada vez que voy a cobrar mi magro sueldo voy preocupada por no olvidar mi número de código; que no rechace mi tarjeta, que no me dé menos de lo que marco y que los billetes sean todos legales. En cuanto al recibo, debo retirarlo en otro local del banco. ¡Esto sí que es progreso! DNI: 1.101.851
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