El ministro de Economía, Domingo Cavallo, negó ayer que organismos multilaterales de crédito, como el Fondo Monetario Internacional (FMI) hayan propuesto una devaluación del peso como condición para apoyar a la Argentina a superar la crisis. Los técnicos del organismo se encuentran desde el lunes auditando las cuentas nacionales. Durante la reunión que mantuvieron con el subsecretario de Relaciones con las Provincias, Hugo Garnero, los integrantes de la misión reclamaron un proyecto del nuevo régimen de coparticipación federal y manifestaron su preocupación por la marcha del canje con los estados provinciales.
El jefe del Palacio de Hacienda, que no estuvo presente en el encuentro con los técnicos, emitió anoche un comunicado negando la posibilidad de que hayan exigido una devaluación del peso, luego de que distintas fuentes dieran cuenta del supuesto pedido por parte del FMI para que la Argentina abandone la paridad cambiaria.
"El Ministerio de Economía desmiente que los organismos multilaterales de crédito le hayan propuesto llevar a cabo una devaluación del peso", dijo Cavallo mediante un parte de prensa de sólo dos párrafos. Luego, el funcionario destacó "el respeto de estos organismos para con el derecho soberano de la Argentina a decidir sobre sus políticas económicas".
Los comentarios comenzaron a rodar el lunes y eran atribuidos a uno de los participantes de la reunión que el domingo por la noche mantuvo el presidente Fernando De la Rúa con empresarios, sindicalistas y banqueros en la quinta de Olivos en el marco del llamado a concertación nacional.
A su vez, ayer por la mañana el titular de la CGT, Rodolfo Daer, admitió que durante ese encuentro Cavallo confesó que el FMI le solicitó la devaluación del peso.
El cruce de versiones impactó en la plaza financiera y provocó una caída de 2,5 por ciento en la Bolsa de Comercio y un aumento de riesgo país a valores superiores a 2.900 puntos básicos, con lo cual se perdió la recuperación que se había evidenciado anteayer.
Debido a la delicada situación, Cavallo se vio forzado a desmentir públicamente los dichos.
En otro orden, la misión del FMI que trabaja en el país avanzó ayer en el estudio de las finanzas provinciales que acumulan una deuda de casi 25.000 millones de dólares y analizó el último acuerdo alcanzado por la coparticipación federal de impuestos.
Este segundo punto es uno de los más complicado debido a que el gobierno nacional se había comprometido en la carta de intención firmada en agosto de este año a enviar al Congreso nacional antes del 30 de noviembre un proyecto de Coparticipación Federal con consenso de las provincias.
Por tanto, no sólo se incumplieron las metas fiscales sino también los compromisos en materia de reformas, lo que obligará al directorio del FMI a buscar una salida política si mantiene la intención de destrabar el desembolso por 1.264 millones de dólares.
La deuda de las provincias
Respecto a las finanzas provinciales, en el acuerdo con el FMI se había fijado un tope de 2.000 millones de dólares para el endeudamiento jurisdiccional, pero según datos oficiales el rojo al tercer trimestre ya supera los 2.400 millones.
El grupo de técnicos encabezado por el jefe del Departamento Occidental, Tomas Reichmann, se reunió con el subsecretario de Relación con las Provincias y le manifestaron su preocupación por la falta de un proyecto del nuevo régimen de coparticipación y por la marcha del canje con las provincias.
Para el 30 de este mes, según lo acordado con el FMI, tenía que haber un proyecto en el Congreso sobre el nuevo régimen de coparticipación, "pero si bien se han logrado acuerdo con 20 de ellas, todavía no hay un nuevo marco legal", aseguró una fuente del Palacio de Hacienda. Además, los técnicos del Fondo manifestaron su preocupación por la viabilidad fiscal de las provincias a la luz de que la refinanciación de sus deudas no se hará, de manera lineal al 7%, sino que ahora los bancos querrían una tasa del 12% a partir del primer año del canje "Todo esto está en otra negociación, pero ellos no ven cómo con esa suba se pueden reducir el gasto público de las provincias y cumplir con el déficit cero", agregó la fuente.