El entrenador Reinaldo Merlo aseguró ayer que con sus dirigidos "únicamente" piensan en Racing y que el próximo partido "será una final", igual a las que jugaron "en los últimos partidos del campeonato" Apertura, sin tener en cuenta las dos goleadas recientes que consiguió River Plate.
Al conjunto de Avellaneda la división de honores puede redituarle casi como un éxito, pues mantendrá la diferencia de cinco unidades sobre las nueve que quedarán en disputa en el torneo Apertura, la misma ventaja que existía antes del clásico adelantado que perdió 1-3 con Boca Juniors en La Bombonera.
De todos modos, Mostaza Merlo se comprometió "a tomar este clásico como todos los partidos de este campeonato, como otra final en la que ganar nos vendría mucho mejor".
"Yo, como mis jugadores, únicamente estoy pensando en Racing. Y estoy bien porque en el plantel están muy bien anímica y futbolísticamente", aseveró el DT de la Academia.
El mediocampista colombiano Alexander Viveros, quien posee las mayores chances de reemplazar al suspendido José Manuel Chatruc, expresó que se siente "muy confiado" en ser de la partida en el crucial clásico frente al único escolta de los albicelestes.
En tanto, su compatriota Gerardo Bedoya atinó a decir que "jugará el que ande mejor" en su puja con el lateral izquierdo Carlos Arano, más allá de que el atesora el anhelo de "querer esta siempre en el equipo".
En otro orden, ayer se conoció que el juez internacional Héctor Baldassi será el encargado de controlar el clásico del domingo. La designación del árbitro cordobés habría sido a dedo.
Medio millón de dólares
Tras aumentar injustificadamente el valor de las plateas visitantes, las autoridades de "Blanquiceleste S. A.", a cargo del gerenciamiento del fútbol de Racing, estiman que el próximo domingo recaudarán medio millón de pesos en el clásico frente a River.
Mañana comenzará la venta de entradas para un partido que promete tener un entorno impactante. Tanto en el estadio de Racing como en el River se abrirán las bocas de expendio, con la sorpresa del incremento de las plateas para los visitantes, de a 30 a 45 pesos, repudiable actitud alentada por la derrota de Boca en la Copa Intercontinental, lo cual supone una motivación extra para la hinchada visitante. (DyN)
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