El Fondo Monetario Internacional (FMI) inició ayer la evaluación del proyecto de presupuesto 2002, que de ser aprobado por el organismo multilateral, permitirá el desembolso de los últimos 1.264 millones de dólares que el Fondo tiene acordado con la Argentina para este año, pese al incumplimiento de las metas fiscales.
"Estoy aquí para colaborar en la reformulación de los programas para el 2002", dijo el jefe del Departamento Hemisferio Occidental, Tomas Reichmann, en el Ministerio de Economía, antes de comenzar las conversaciones formales con el secretario de Hacienda, Jorge Baldrich.
Detrás de esta afirmación quedaría implícito que el organismo ya cerró la revisión de las cuentas públicas del año 2001, en las que, según trascendió, se incluye un desvío de al menos 1.300 millones respecto al tope de 6.500 acordado en agosto último.
Aunque desde el gobierno prefirieron el silencio a la hora de opinar sobre los resultados de la misión del FMI, fuentes del Palacio de Hacienda revelaron que si el organismo da su visto bueno para el presupuesto 2002, un "waiver" por el incumplimiento de las metas fiscales de este año y girará los fondos comprometidos para este año, que suman 1.264 millones.
En realidad los números no le cerraron a Economía, pero eso ya no sería un obstáculo. Ayer, desde la dependencia que pilotea Domingo Cavallo se dio a conocer que las cuentas públicas en octubre registraron un déficit de 696,8 millones.
Con este resultado, el Estado argentino acumula en diez meses un desequilibrio de 6.855,2 millones de pesos, unos 355,2 millones por encima de la meta anual de 6.500 millones acordada con el FMI.
Para que el FMI de su aprobación al desembolso, la Argentina deberá reducir el déficit fiscal que a octubre ascendía a 7.200 millones de pesos y que para todo el año debería ser inferior a 6.500 millones.
El ministro Domingo Cavallo reconoció que existirá un "un desfasaje pequeño", en el cumplimiento a las metas del déficit fiscal para este año. Pero en Economía saben que cuanto menor sea (el desvío), más fácil será lograr el perdón del FMI y el desembolso de estos y otros fondos.
Para ajustar esta cifra Economía tiene previsto, por un lado, reducir la cantidad de erogaciones en concepto de intereses a partir del canje que finaliza el viernes.
Pero además buscará reducir fuertemente el gasto primario, por lo que analiza nuevos recortes en el Pami y la Ansés, además de diversos planes.
También busca con sus proveedores una refinanciación de las deudas a menores tasas luego de que los bancos acepten entregar sus títulos de deuda que rinden hasta el 20%, por créditos con tasas del 7%.
El gordo de Navidad
El desembolso de los 1.264 millones para el resto del año le permitiría a Hacienda respirar aliviada lo que resta del año. En rigor, requiere de estos fondos para hacer frente a los 2.700 millones de dólares que vencen hasta diciembre en concepto de pago de intereses y capital, incluidos varios de los títulos que entran en el canje. Cavallo trató el martes pasado quitarle dramatismo a esta misión al asegurar que "es natural que las autoridades del FMI sigan examinando la sostenibilidad fiscal de nuestro programa, porque tantas veces Argentina prometió reducir el gasto y el déficit en el pasado y no las cumplió, que ahora obviamente tienen sus dudas".
Sin embargo, para dejar en claro la situación actual y la que se avecina, y la necesidad de ajustar para cumplir con los organismos internacionales, Cavallo destacó que "el año que vienen tendremos que manejarnos con financiamiento cero, por eso sostendremos el déficit cero".
Aunque las palabras del enviado del Fondo abrieron ayer una esperanza para el desembolso de dinero fresco, Reichmann no dio certezas sobre esta posibilidad.
Para el FMI es fundamental el estudio de las metas presupuestarias para el año próximo en virtud de la magnitud del recorte de gastos que deberá efectuar la administración central para cumplir con la meta del déficit cero y cerrar las cuentas prescindiendo del apoyo de los mercados de crédito.
El subsecretario de Presupuesto, Jorge Sansone, afirmó ayer que la intención del Poder Ejecutivo es enviar el proyecto de presupuesto al Congreso antes del viernes de esta semana.
Según comentó el desdoblamiento del ministerio de Acción Social y el de Desarrollo Social fue uno de los factores que demoró la confección del proyecto.
Pese a la situación de debilidad de la Argentina, para el FMI también es una negociación complicada, pues siente la presión de haber apoyado el "blindaje", el canje de deuda de junio y la posterior renegociación de metas, sin que la Argentina haya obtenido los resultados proyectados.