Año CXXXV
 Nº 49.312
Rosario,
lunes  26 de
noviembre de 2001
Min 12º
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Derby pidió "perdogasón" por su yerro publicitario

La marca Derby, que produce el grupo Nobleza Picardo, pidió públicas disculpas a los rosarinos por haber puesto en las etiquetas de estos cigarrillos la imagen de un faro como construcción emblemática de la ciudad, cuando en realidad aquí no hay faros.
El pedido tomó forma de un importante aviso en este mismo diario, y se valió del lenguaje rosarigasino: "Perdogasón", tituló en grandes letras Derby.
"Nos equivocamos, es obvio que Santa Fe no es Rosario y que Rosario no es Santa Fe. Nada más lejos, no importa lo cerca que estén. Pero aunque Dios sea argentino, los que hacemos Derby somos humanos. Y metimos la pata. Mejor dicho, metimos un paisaje de Santa Fe en el paquete de Rosario", afirma, entre otras cosas, el texto.
La empresa había querido mostrar distintos lugares del país a través de construcciones, animales o paisajes representativos, y tuvo tanta mala suerte con Rosario que por error puso un faro muy similar a uno que hay en la ciudad de Santa Fe, ubicado en la punta de un gran muelle, tipo paseo. Y para que no quedaran dudas del yerro, abajo del faro decía "Santa Fe - Rosario".
Se trata de una campaña por la cual se sorteaban viajes a los distintos destinos cuyos paisajes salían en las etiquetas. Quien ganara Rosario se iba a llevar la sorpresa de que el faro no existe.
"La cabeza funciona de maneras misteriosas. No somos nosotros los que vamos a descubrir cómo", se excusan desde Derby.
La Capital publicó el blooper en su edición del 7 de este mes. En esa oportunidad se pidió explicaciones a la empresa, que al principio ensayó una excusa: "Buscábamos algo distinto, más allá de lo que todos conocemos de cada lugar". Sin embargo, y ante la evidencia de que un faro no era tan conocido en Rosario simplemente porque no existe, admitieron que no había justificativos y prometieron "analizar mucho mejor el material la próxima vez".
En la edición de ayer de este diario, la empresa pidió públicamente disculpas en un gran aviso que remataba con un "perdogasón una vegasez magasás". En fin. Perdonagasados muchagasasos.


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