Cañada de Gómez. - Un nuevo estudio de prefactibilidad de obras complementarias sobre el arroyo Cañada de Gómez efectuado por la Universidad Nacional del Litoral (UNL) determinó nuevas alternativas para evitar futuros desbordes del curso de agua, como el que un año atrás cobró tres muertes y cuantiosos daños materiales. Las principales opciones son ensanchar aún más el arroyo en el tramo urbano y construir una o dos presas alternativas en el sector sureste de la jurisdicción.
El análisis de la situación ocurrida el pasado 22 de noviembre, que incluye factores técnicos, económicos, ambientales, sociales, jurídicos y urbanísticos, fue presentado por especialistas de la universidad y el director de Hidráulica de la provincia, Ricardo Fratti.
Las obras requerirán de la inversión de unos siete millones de pesos. Una síntesis presentada en la reunión hace referencia a varias alternativas de solución. La primera consiste en duplicar el actual cauce del arroyo, para un diseño de 830 metros cúbicos, aunque se expusieron otras obras que implican ensanchar el canal y construir presas que estarán ubicadas a 2.000 metros de la estación Las Trojas y a 6.000 metros del casco urbano cañadense en el cuadrante sureste.
En el primero de los casos el arroyo tendrá un ancho de 60 metros, en tanto que en la segunda opción planteada la será de 40. Los especialistas también expusieron sobre la posibilidad de relocalizar la zona inundable de Cañada de Gómez, pero esto llevaría a una inversión superior a los 50 millones.
Los técnicos e ingenieros de la UNL recordaron que el fenómeno que ocurrió en Cañada de Gómez posee una recurrencia de más de 1.000 años, y que la selección de las alternativas del sistema de control de crecida se hizo sobre la base de un multicriterio contemplando factores técnicos, económicos, ambientales y sociales.
Escollo
La obtención de los fondos para la concreción de los trabajos constituye el principal escollo a resolver, ya que la provincia de Santa Fe debe atender problemas similares en otros puntos de la geografía, en especial las regiones del extremo sur, críticamente anegadas.
Sin embargo, como consecuencia de la tragedia del año pasado, la obra cañadense tendrá prioridad a la hora de resolver inconvenientes referidos a problemas hídricos, según se explicó en la reunión. En este sentido, Fratti hizo referencia a los problemas presupuestarios que enfrenta la administración de Carlos Reutemann, y sugirió que "debería pedirse un auxilio del gobierno nacional para el financiamiento de la obra".
"Este no es proyecto definitivo, es un trabajo de prefactibilidad técnica que deberá debatirse en el seno de la comunidad. Mi opinión es que al haber diversas alternativas los pobladores de Cañada de Gómez deberán decidir cuál es la más conveniente", dijo el funcionario.
Con posterioridad a la conferencia de prensa, los especialistas de la UNL y los funcionarios que viajaron a esta ciudad se reunieron con los vecinos en la Escuela Municipal. En ese ámbito se multiplicaron las consultas y las dudas en relación con los detalles técnicos que fueron suministrados.