Carolina Taffoni
Attaque 77 llega a Rosario para presentar "Trapos", su disco en vivo que ya lleva vendidas 60 mil copias. El grupo tocará mañana, a partir de las 20, en El Faro, Rondeau y Circunvalación. Como bandas invitadas actuarán los Argies y WDK. El grupo formado por Ciro Pertusi (voz y guitarra), Mariano Martínez (guitarras), Leonardo De Cecco (batería) y Luciano Scaglione (bajo) acaba de regresar de una larga gira que pasó por Panamá, México, Bolivia, Chile, Perú, España y Suiza. Ahora se prepara para su tercera presentación en el año en el estadio Obras de Buenos Aires, programada para el 8 de diciembre. El líder de Attaque, Ciro Pertusi, adelantó a Escenario cómo será el show de mañana, dijo que el grupo resucitó el hit "Hacelo por mí" "para darle a la canción el valor que se merece", definió a la música de la banda como "una especie de analgésico" y aseguró que el rock "es un antídoto contra la vejez". -¿Por qué decidieron sacar un segundo disco en vivo? -Porque el primero que editamos, "Rabioso", no fue un disco completo. Fue una grabación bastante casual del primer recital que hicimos en Obras. En ese momento las cosas pasaban muy rápido y nos sobrepasaban. Habíamos empezado en el 87 y en el 91 ya estábamos haciendo dos Obras. Creíamos que grabar el disco ahí era una oportunidad que tal vez no se podría repetir. Con "Trapos", en cambio, la idea de hacer un álbum en vivo fue premeditada. Es un compacto con 23 canciones, donde el público tiene mucha participación y está bien definido. "Rabioso" tenía sólo 7 temas, era más un souvenir de Navidad para todos los fans y rescataba el boom de un momento. -¿Cuál fue el criterio para elegir los temas? -Intentamos mantener un equilibrio entre los temas que le gustan a la banda y los que prefiere el público. También es cierto que cualquier tema que nosotros elijamos al público le va a gustar, porque son más fanáticos que nosotros (risas). El último corte de "Radio insomnio", "Beatle", no salió en el álbum. En su lugar pusimos "Hacelo por mí", algo que nadie se esperaba. -¿Por qué resucitaron "Hacelo por mí", un tema que tenían guardado en el freezer? -Quisimos darle el justo valor que tiene esa canción. Objetivamente puedo decir que es un gran tema, melódico y con mucha fuerza. Para la gente, además, es una canción histórica y referente, que ya forma parte del rock nacional, más que a Attaque 77. Nosotros decidimos guardar la canción por un tiempo porque se había vuelto popular hasta el hartazgo. En un momento nos habíamos contagiado de la marea que provoca un tema así. Había fans que querían que tocáramos canciones más de culto de Attaque y otros que querían que hiciéramos "Hacelo por mí". También estaba la presión de la gente del negocio del rock, los productores, los disqueros... Para el disco en vivo hicimos una versión renovada, con voces más beatle y una base más rockera, más Neil Young. Creo que la canción ahora tiene el valor y el respeto que se merece. -¿Quién eligió ese tema como corte de difusión? -La compañía discográfica. Desde que firmamos con BMG, hace cinco años, decidimos dejarle a ellos la tarea de elegir el tema de difusión, porque consideramos que cualquiera de nuestras canciones nos representa. Ellos eligieron "Hacelo por mí" y la cosa resultó bien, más digna que nunca. Fue como tomarnos una especie de revancha. Hoy disfrutamos del éxito con menos histeria. -¿Cómo es el show que están presentando? -Tenemos el repertorio de "Trapos" como hilo conductor. Nos gusta mucho el comienzo con "Perfección", y entonces respetamos esa lista y vamos intercalando algunas rarezas, como un cover de un tema de AC/DC que grabamos para un compilado que salió en Italia. Además tocamos canciones que no aparecen usualmente en vivo, como "Ladrón", "Las fotos de Lily", "Escucha a tu corazón", "Un poco de respeto" o "La colina de la vida". -¿Hacen algún homenaje a Joey Ramone? -Un homenaje propiamente dicho no, pero tocamos los temas de los Ramones que aparecen en el disco "Otras canciones", "Beat On The Brat" y "Do You Wanna Dance", que eran dos clásicos de ellos. -¿Los sorprendió el éxito de "Trapos"? -Sí, nunca pensé que podía llegar a vender 60 mil copias. Es más, creí que iba a vender menos que los discos de estudio. En los últimos años Attaque mantuvo una venta de 25 mil copias por álbum, que es un buen promedio para lo que yo llamo "venta de culto". Algo así también pasa con tipos como (Luis Alberto) Spinetta, que puede vender unas 15 mil copias cada vez que edita un compacto. -¿Sentís que la crisis económica los afectó? -No, la verdad que no, o por lo menos no como a todos. Eso es lo más raro de nuestra historia. Nuestra carrera parece estar en un mundo aparte. Alguna gente dice que tenés que ir al interior para saber cómo está el país. Yo no creo que sea así. A lo mejor en el interior la crisis está más al descubierto, pero es la misma que en Buenos Aires. -¿Qué balance hacés de los 14 años de carrera de la banda? -Somos un grupo con mucha suerte, con buena estrella. También somos una banda de mucho trabajo y sacrificio, y detrás de todo eso hay algo de intuición y de talento, y de buena predisposición para la convivencia. Esta formación de Attaque es la más duradera de todas. Algunos separan el Attaque de antes con el de ahora, pero esta es la banda definitiva. Estamos más juntos que nunca y tenemos mucha historia. -¿Notás que el público del grupo se fue renovando? -Lo que yo veo en los recitales es que aumentó muchísimo la presencia femenina. El hombre siempre puso a la mujer en un costado, por simple machismo o por miedo a la competencia. Pero ahora las chicas se impusieron y coparon todos los espectáculos de rock. Así lograron también imponer un equilibrio. Las chicas son más sensibles y le prestan más atención a las letras, eso contagió a los chicos, y además ayudó a terminar con la violencia en los shows. -Ahora se habla de Attaque 77 como una banda que tiene cierta conciencia política, ¿qué opinás de esa visión? -Creo que a veces se van medio al carajo. Somos nada más que un grupo de rock. Lógico que en el ser humano hay una especie de delirio por curar, por querer cambiar las cosas. En ese sentido nuestra música es como una especie de analgésico, como unas aspirinetas. Pero tampoco creo que sea para tanto. Como canto en "Canción inútil", las verdaderas luchas están protagonizadas por seres anónimos, o como se pregunta Bob Marley en "Redemption Song", "¿por cuánto tiempo matan a nuestros profetas mientras nosotros estamos preocupados por luchas individualistas y materialistas?". Así han muerto en plena soledad gente como el Che Guevara. "Canción inútil" habla de los chicos que a veces nos idolatran demasiado, cuando estaría bueno que miraran hacia el prójimo y le dieran el mismo aliento que nos dan a nosotros. -¿El rock te mantiene por siempre joven? -A mí sí. Sin quererlo me di cuenta que fue una fórmula tipo Dorian Gray. A mediados de los 90 yo dejé de tomar alcohol, y pude asomar la cabeza más sobrio de lo que estaba antes. Cuando veo una foto mía de ahora y una del año 91 me doy cuenta que antes era mucho más viejo. El rock es un antídoto contra la vejez.
| |