El entrenador Alfio Basile, quien mañana dirigirá "El Equipo de las Estrellas" frente al seleccionado argentino de fútbol, anticipó ayer que mañana su principal deseo será "dejar contento a Diego" Maradona, sin importarle el resultado del partido-homenaje al 10.
"A muchos jugadores de los que voy a dirigir los conoceré personalmente en el vestuario -advirtió el Coco Basile-. Porque llegan el mismo sábado o porque no voy a tener una prácticas con ellos, siquiera".
De todos modos, "por más que no tenga mucho que inventar con las estrellas" que conformarán su equipo, el ex DT del seleccionado nacional en el Mundial Estados Unidos 94 aseveró que tomará "en serio" este tributo a Maradona.
"Hay grandes jugadores, se armará un buen equipo y tendremos un buen espectáculo para dejar contenta a la gente y a Diego (Maradona), que es lo principal", enfatizó el Coco.
Luego, precisó que jugará con un "esquema clásico, el 4-3-1-2" e impartirá "indicaciones" desde el banco de suplentes, "más allá de que por la calidad de los que entren en la cancha, ya sabrán muy bien qué hacer, cómo jugar".
"Lástima que (Claudio) Caniggia no pueda venir por estar lesionado. Diego y la gente lo quiere mucho", acotó Basile, durante un reportaje concedido al programa "Siga, siga", que se emite por Radio Nacional.
Recordó que ya tuvo una experiencia similar en México, cuando dirigió un partido "a beneficio de las huerfanitas (del mediocampista ofensivo) Juan Pablo Gómez. En los camarines conocí a los que dirigí después, pero no están a la altura de este gran nivel".
También se lo consultó sobre otros temas, pero se rehusó terminantemente "a hablar de Boca" y la posibilidad de suceder a su colega Carlos Bianchi; del mismo modo que no deslizó "ninguna duda en la predisposición de Argentina para ganarle a Uruguay", descartando cualquier "arreglo" en el último partido de las Eliminatorias Sudamericanas del Mundial Japón-Corea 2002.
Por último, Basile remarcó que "extrañaba horrores" al país y, por tal razón, "terminé mi contrato en el América, de México, donde me atendieron de primera, de maravillas".
"América es en México lo que River es en Argentina. Tiene todo, aunque también está sufriendo la crisis económica mundial. Allá gané varias copas, pero me afectó mucho los últimos seis meses estar tan lejos de mis afectos", finalizó. (DyN)
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