El seleccionado brasileño buscará hoy conseguir la clasificación para Japón-Corea 2002 y mantener así una perfecta asistencia mundialista cuando visite -con arbitraje del venezolano Luis Solórzano- a Bolivia en el estadio Hernando Siles, de La Paz, ubicado a 3.650 metros sobre el nivel del mar.
El escenario de hoy es histórico para Brasil, ya que en ese estadio sufrió su primera caída en una eliminatoria mundialista luego de un invicto de 43 años (2-0 en 1993) y gozó la consagración de campeón de la Copa América en 1997.
Este Bolivia-Brasil será el noveno cotejo entre ambos seleccionados en toda la historia de las eliminatorias y como nunca sucedió antes, a dos fechas de que concluya la clasificación, Brasil necesita los puntos para ir al Mundial.
Por su parte, Bolivia, que perdió hace cinco fechas sus posibilidades de llegar al Japón-Corea, jugará por el honor e intentará salvar al menos esa parte de su pésima campaña.
Para Brasil el camino al primer Mundial del siglo XXI estuvo lleno de inconvenientes. Inició la ruta con Wanderley Luxemburgo, pero los resultados no fueron los esperados y asumió Emerson Leao, quien también fracasó dejándole el puesto a Luiz Felipe Scolari.
Brasil, con astros que triunfan en el fútbol europeo y su rica historia de triunfos, recibió duras bofetadas, como nunca en esta clasificación al perder ante Paraguay, Chile, Ecuador, Uruguay y Argentina.
Los esquemas cambiaron con los entrenadores. Luxemburgo apostó todas las fichas a las estrellas, en cambio Leao y el mismo Scolari les dieron prioridad a los jugadores que actuán en equipos brasileños.
Lo concreto es que lejos de ser el podero seleccionado de antaño, Brasil sufre para llegar a Japón-Japón y ahora apuesta a lograr tres puntos en la altura paceña, aunque en esta eliminatorias los locales apenas ganaron tres cotejos en casa.
En Bolivia debutará como entrenador el argentino nacionalizado boliviano Carlos Trucco (ex arquero de Unión y Vélez), quien reemplazó a su compatriota Jorge Habbeger, que perdió los dos cotejos previos en que dirigió a Bolivia. (Télam)
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La Ciudad
